A una semana del tercer paro a la gestión Milei la CGT espera un reclamo potente
La movilización del 9 y la huelga nacional del 10 reciben adhesiones del sindicalismo internacional
A una semana del jueves 10 la CGT ratificó como “decisión tomada” la jornada de acción gremial por 36 horas que decretó contra el gobierno de Javier Milei.Será en 7 días cuando tendrá lugar el paro general por 24 horas que completará los reclamos que se iniciarán el miércoles 9 con la movilización en respaldo a la protesta de los jubilados en Congreso.
De esta forma se concretará el cronograma sindical de rechazo a la política económica, la pauta paritaria, la defensa del salario y los derechos de los jubilados, entre otros temas que votó el consejo directivo de Azopardo. La tesitura del “hasta acá”, que informó este medio como postura de la central obrera se había detonado el miércoles de represión feroz en la plaza de Entre Ríos y Rivadavia, ocasión en la que condenó el accionar de las fuerzas de seguridad en un comunicado.Siempre con debate interno hasta los sindicatos más relevantes del sector dialoguista y dominante en cuanto al poder cegetista aprobaron el tercer paro general en lo que va de la administración libertaria.
“Antisindical y antilaboral” fue la definición del secretario adjunto de la CGT Andrés Rodríguez sobre el Gobierno para destacar la fortaleza con la que llega esa central a la huelga nacional. El también líder de UPCN es uno de los referentes del núcleo dialoguista y en tal sentido sus definiciones revelan el termómetro del movimiento obrero respecto a la gestión Milei.
Omar Maturano, titular de La Fraternidad, la organización que tutela a los maquinistas ferroviarios, también anticipó que la adhesión de los sindicatos del transporte será potente y motor de la huelga, adhesión gremial que además se considera decisivas para graduar el alcance de cualquier paro.
Sin perjuicio de los dichos sindicales hay un párrafo de intrigas en la vigilia de la huelga sobre qué decisión tomará al respecto la Unión Tranviarios Automotor (UTA) que, por conflicto paritario, tiene dictada una conciliación obligatoria por 15 días, lapso que abarca el jueves del paro. A la tregua forzada se suman las suspicacias de la dirigencia transportista y otros rubros sobre la “voluntad” de la UTA para adherir al paro.
El inicio de la “acción gremial” como definió las fechas la conducción obrera será el mediodía del 9 cuando los sindicatos confederados movilizarán al Congreso en la marcha de los miércoles de los jubilados. Para el jueves 10 la CGT llevará adelante su tercer paro contra la administración libertaria el cual a su vez se constituirá en la antesala de otra manifestación callejera de la central. Según lo anticipo Rodríguez la movilización como alternativa de reclamo también se expresará 1ro de mayo con una movilización por el Día del Trabajador.
Abocada a cada detalle que hacen tanto a la movilización como la huelga vale recordar otra señal de ratificación que tuvo lugar durante un plenario de las delegaciones regionales cegetistas detodo el país en la sede de Azopardo. Muestra de solidez para la medida de fuerza a la cual la Casa Rosada “no le encuentra razón alguna”, según lo han expresado funcionarios y la vocería presidencial.
Respaldo de BrasilLas dos jornadas de reclamo obrero alcanzan por estas horas una repercusión regional. El camionero Pablo Moyano en su rol de vicepresidente global de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) recibió a Paulo Joao Estusia miembro regional de dicho estamento. Durante ese encuentro el sindicalista brasilero le expresó el respaldo gremial de los trabajadores del vecino país. Ambos coincidieron en señalar que “las políticas de la derecha atentan contra el pueblo” y plantearon similitudes entre el gobierno de Jair Bolsonaro y Javier Milei. “Las medidas de fuerza son las herramientas fundamentales de los países democráticos”, expresó Estusia ocasión en la que junto a Moyano repudiaron desde la ITF el ataque a los trabajadores, la represión a los jubilados “y la falta de sensibilidad con las personas que son sumergidas a la pobreza por políticas de ajuste, hambre, abandono, despidos y quita de derechos”.