La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) derogó 23 resoluciones generales dictadas entre 1998 y 1999, en el marco de una revisión normativa que viene llevando a cabo el organismo con el objetivo de agilizar el comercio exterior.

La abrogación de todas esas medidas se concretó mediante la Resolución General 5693/2025 publicada hoy en el Boletín oficial, que dejan sin efecto la intervención de cámaras, federaciones y asociaciones representativas de actividades sectoriales, en su carácter de observadoras, en la verificación física de las mercaderías destinadas a importación.

 

“Dilaciones innecesarias”

 

En los considerandos de la resolución, ARCA advirtió que con el conjunto de normas derogadas “la implementación operativa del circuito vigente requiere planificar los actos de verificación” con una antelación suficiente que permita a las entidades participantes “evaluar su presencia real en carácter de observadoras, circunstancia que deriva en dilaciones innecesarias durante el trámite del despacho de las mercaderías”.

“En base a la experiencia recogida y conforme lo informado por las áreas operativas competentes de la Dirección General de Aduanas, el referido sistema de participación ha resultado de baja concurrencia, generando demoras y extracostos asociados al trámite del despacho de las mercaderías comprendidas en dicho circuito”, planteó.

En consecuencia, ARCA consideró “oportuna” la abrogación de las normas “en pos de favorecer la agilización del desaduanamiento de mercaderías, sin alterar el control aduanero y la trazabilidad de las operaciones de importación”.

 

“Digno de un arqueólogo”

 

La tarea de recopilación de las normas derogadas fue destacada por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado Federico Sturzenegger, quien la consideró “un trabajo digno de un arqueólogo” por parte del equipo de la ex AFIP, comandado por su director general, Juan Pazo.

ARCA sostuvo en un comunicado que “la baja concurrencia de este sistema de participación implicaba demoras debido a los tiempos de planificación de los actos de verificación, que requerían la presencia real de dichas entidades en su carácter de observadoras”.

“A su vez, generaba costos adicionales asociados al trámite del despacho de las mercaderías comprendidas en el circuito aduanero”, agregó.

 

Duplicación de barreras

 

Sturzenegger remitió a su vez a la Resolución General 5586 de octubre del año pasado, en la que ARCA eliminó la participación de cámaras como veedoras del proceso de importación. 

“Para decirlo en criollo, para sacar un container que iba por canal rojo necesitabas la aprobación de tu competidor local. El modelo de la casta en formato puro”, manifestó el ministro en uno de sus habituales posteos en la red social X.

No obstante, eso resultó insuficiente, ante la aparición “en muchas áreas” de restricciones que “tienen infinidad de ‘redundancias’, es decir, barreras duplicadas”, señaló.  

“Por eso celebramos la decisión de Juan Pazo que, en un trabajo digno de un arqueólogo, descubrió estas redundancias”, destacó, para aclarar que la nueva medida “deroga las resoluciones generales 172, 210, 273, 274, 297, 345, 366, 538, 560, 578, 579, 580, 595, 617, 618, 626, 642, 647, 667, 673, 674, 676 y 692, que eran redundancias adicionales”.

Sturzenegger precisó que “aunque estos mecanismos no se activaban de manera habitual, ciertamente eran un disuasorio, además de sobrecargar al proceso y a la aduana”.