Adam Sandler de platino para aplaudir en HBO Max
Algunas de las mejores películas de ese gran comediante -demasiado despreciado por quienes señalan con el dedito- que es Adam Sandler están en la grilla de HBO Max. Desde pelear con Jack Nicholson hasta flirtar con Jennifer Aniston, pasando por resolver el conflicto de Medio Oriente, va el Sandler máximo.
Un casi superhéroe del Mossad tiene un sueño: dejar de perseguir a su némesis, un archiagente palestino, y ser estilista en Nueva York, donde recala en un barrio con palestinos, judíos, indios y largo etcétera. Sátira brillante de lo que es la situación en Medio Oriente y, de paso, probablemente la película que mejor explica tanto el negocio de la guerra (cualquier guerra) como aquello que fue alguna vez la utopía americana de la segunda oportunidad. Cae todo en el medio: el sexo, el amor, el racismo y mucho más. Joya.
Una película de Judd Apatow con Seth Rogen en la que Sandler interpreta a un capocómico insoportable, pedante y un poco perverso que es diagnosticado con cáncer. Pero cuidado: no se trata de una película lacrimógena con enseñanzas de vida sino todo lo contrario: la feroz confirmación de que los cambios en la vida son menos de lo que el cine enseña. Por momentos tierna, en otros, muy ácida y con una última hora sensacional. Sandler muestra su personaje de siempre y también otro, oscuro y complementario. De lo mejor de su carrera.
Locos de iraHay que ser un gigantesco comediante para actuar a la par de Jack Nicholson. Sandler es un tímido con problemas de ira (y un trauma infantil, constante en su cine) y Nicholson, una especie de gurú que se convierte en la persona más molesta del universo. En el fondo es un filme psicológico, pero lo que vemos es una serie de gags y situaciones de una tensión extraordinaria. La forma de resolver el trauma es de lo más cómico que hizo Sandler (con John C. Reilly, genio, como monje budista) y hay algo de The Game de Fincher en la historia.
Una esposa de mentiraOtro duelo de comedia: Sandler versus (o gracias a, o con) Jennifer Aniston, actriz que mejora con los años. Para conquistar a la chica de sus sueños, por raras cuestiones del guión (pero perfectamente plausibles en este universo), Sandler finge tener una ex esposa. El rol lo cumple su asistente y mejor amiga. Toda la película es lo que podría llamarse "comedia de rematrimonio" y en realidad tiene un trasfondo complicado y una relación difícil a resolver. Lo que implica que también es una joya de guión. Ella está para aplaudir.