Luego de que el sindicato de mecánicos (Smata) ratificara que la empresa Nissan dejará el país a corto plazo, lo cual incluye el cierre de su planta en Córdoba, las autopartistas de esa provincia iniciaron contactos con el gobierno mediterráneo para analizar el cuadro de situación. La coyuntura incluso se enmarca en el pedido para que se declare el Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) a cargo de la firma Maxion Montich ante la secretaría de Trabajo cordobesa.Si Nissan se aleja del territorio nacional y deja de producir la pickup Frontier, en la alianza que desarrolló con Renault, para los sindicatos del sector será un golpe fortísimo para todo el espectro automotriz. Smata, como publicó BAE Negocios, viene desarrollando asambleas en Nissan denunciando que la mayor parte del personal está suspendido.

Otra de las proveedoras de la firma japonesa radicada en Córdoba, F2J Techplast, también reclamó el PPC y dentro de la gama de instancias que determina esa dinámica se incluyen suspensiones, despidos, modificaciones al régimen de licencias y otras alternativas. Todo a la espera definiciones que tendrán impacto en cerca de 400 trabajadores.Los casos se suceden y hay 20 autopartistas que analizan apelar al PPC, un instrumento que les permite a las empresas la reducción de dotaciones. La nómina incluye a las firmas Lear, Magna, Denso, Famma Automotive y Fumiscor, entre otras. Dentro de dicho esquema vale acotar que hay varias que a su vez tercerizan tareas, con lo cual el impacto podría ser mayor.Completa el panorama respecto a este sector de la industria nacional, que el secretario general de Smata, Ricardo Pignanelli manifestó en diferentes notas periodísticas que la la salida de Nissan es cosa juzgada. "La decisión está tomada", manifestó el dirigente que integra además la cúpula de los Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina.