Dos meses después del planteo formulado por el Gobierno para mejorar el intercambio bilateral, Brasil informó que se levantarán ciertas barreras comerciales y pidió que la Argentina recorte las licencias no automáticas para el ingreso de bienes.

De acuerdo con la comunicación intergubernamental, dijeron fuentes oficiales a BAE Negocios, "se aprobarán los pedidos de Argentina para acelerar el comercio: las barreras no arancelarias que afectan a la importante cadena vitivinícola argentina y que impactan en la exportación de mosto de uva a granel".

Mientras el Gobierno, a su vez, revisará el sistema de licencias, Brasil registrará agroquímicos argentinos; y no impondrá impuestos o bajará alícuotas sobre las exportaciones de servicios y de productos digitales que afectan a uno de los sectores más competitivos.

Asimismo, no habrá más exigencia para describir la composición química de productos cosméticos en portugués, y se reconocerán los ensayos realizados en la Argentina. En abril pasado, funcionarios de Desarrollo Productivo se vieron con sus pares de la cartera de Desarrollo, Industria y Comercio de Brasil, por la existencia de trabas y el desequilibrio de la balanza bilateral desde hace dos décadas.

“Reconocen las regulaciones nocivas pero piden bajar el número de licencias no automáticas de la Argentina porque consideran que son muchas”, expresaron en Cancillería.

Insumos

Por su parte, Brasil tomó nota del pedido nacional y respondió en forma positiva. “Se agilizará el ingreso de mercaderías pero por su parte, quiere menos licencias no automáticas”, señalaron. Las licencias automáticas representan casi el 70% de las importaciones nacionales, mayoritariamente insumos o bienes intermedios que no cuentan con fabricación local.

Este tipo de licencias -como su nombre lo indica- entra sin demoras, mientras que las no automáticas puede extenderse hasta 60 días corridos. En forma complementaria, el embajador en Brasil, Daniel Scioli, avanza en su estrategia por diferentes estados brasileños con el fin de promover las inversiones y potenciar las exportaciones a ese país.

Con ese fin, mantuvo varias reuniones con empresarios, entre ellos, con directivos de la Federación de Industrias del Estado de São Paulo (FIESP), una de las entidades industriales más poderosas del país vecino. “Se abordaron temas de interés bilateral y los avances en el intercambio comercial, que en el primer cuatrimestre de este año creció un 23% con respecto al año pasado”, comentaron cerca de Scioli.