La tasa de desempleo en Brasil subió 0,8 puntos porcentuales y cerró el primer trimestre de 2021 al 14,7 por ciento. En el último trimestre del año pasado, el indicador era del 13,9 por ciento.

Según datos de la encuesta difundida por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), están desempleadas 880 mil personas más, y el total ahora es de 14,8 millones en el país, según indicó la Agencia Brasil.

Adriana Beringuy, analista de la encuesta, explicó que esta es la tasa más alta y el mayor contingente de desocupados desde el inicio de la serie histórica, en 2012. La experta señaló que el indicador tiene un componente estacional: "este aumento de la población desocupada es un efecto estacional esperado. Las tasas de desempleo tienden a aumentar al inicio de cada año, ante el proceso de despido de personas que fueron contratadas a finales del año anterior".

El contingente de ocupados (85,7 millones) se mantuvo estadísticamente estable respecto al último trimestre de 2020, pero el nivel de ocupación descendió 0,5 puntos porcentuales, al 48,4 por ciento. También según Beringuy, el nivel de ocupación ha estado por debajo del 50% desde el trimestre marzo-mayo del año pasado. Es decir, menos de la mitad de la población en edad de trabajar lleva un año ocupada.

 

Informalidad

"Esta reducción en el nivel de ocupación está siendo influenciada por la contracción de la ocupación durante el año pasado, cuando muchas personas perdieron sus puestos de trabajo. En un año, en comparación con el primer trimestre de 2020, la población ocupada disminuyó en 6,6 millones de personas", dijo.

También permanecieron estables la tasa de informalidad, que se situó en un 39,6%, y la cifra de los "desalentados", que es como el IBGE considera a quienes han desistido de buscar un empleo, que sumaron seis millones de personas y permanecen en niveles récord, pues registra un incremento del 25,1% en solo un año.

En comparación interanual, el único sector que registró un aumento de personal fue la agricultura (+4% o cerca de 329.000 personas), en tanto que hubo una reducción de 7,7% en la plantilla industrial (-914.000 personas). Otros sectores muy golpeados fueron el de alojamiento y alimentación (-26,1%, lo que supone una reducción de 1,4 millones del efectivo laboral), indicó Deutsche Welle.