Tras la finalización del confinamiento de 9 días dispuesto por el Gobierno nacional, tanto la Ciudad de Buenos Aires como las provincias de Córdoba y Mendoza anunciaron que retomaran este lunes las clases presenciales, mientras que Santa Fe, la otra jurisdicción que en su momento había rechazado la educación virtual, ahora, y ante el “agravamiento” epidemiológico registrado en los últimos días, optó por suspender el regreso a las aulas por el lapso de una semana.

El viernes pasado, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció que la Ciudad regresará a partir de mañana a las aulas en las escuelas primarias, de nivel inicial y secundarias -en este caso, solo en los primeros dos años-, decisión con la que profundizó la tensión existente con el Gobierno nacionaal, que mantiene la disposición de continuar con clases virtuales en todo el país.

El anuncio de la medida generó la inmediata reacción por parte del ministro de Educación de la nación, Nicolás Trotta, quien consideró que "la presencialidad no es una cuestión de deseo sino de responsabilidad y de analizar las variables epidemiológicas". 

"La ciudad de Buenos Aires triplica el indicador y la tasa de incidencia de Alemania para cerrar escuelas", ejemplificó el funcionario, al tiempo que acusó al Gobierno porteño de "incumplir los parámetros sanitarios que hemos construido en consenso con todas las jurisdicciones".

En tanto que la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, justificó el regreso a las aulas bajo el argumento de que "el futuro necesita los chicos en la escuela, los chicos la necesitan hoy, entonces tenemos que tomar las decisiones que nos permitan construir ese futuro en las aulas".

Por su parte, la secretaria general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera), Angélica Graciano, expresó su rechazo a la medida al afirmar que de esa manera, Rodríguez Larreta retoma “su campaña política usando como bandera la presencialidad escolar".  

Córdoba y Mendoza también vuelven a la presencialidad 

Si bien ante la finalización del confinamiento, la atención estuvo puesto en la decisión que asumiría el Gobierno porteño, cabe destacar que también las provincias de Córdoba y Mendoza anunciaron que mañana retomaran la presencialidad escolar.

Fue el vicegobernador cordobés Manuel Calvo, quien el viernes anunció que esa provincia volverá a las clases presenciales en el nivel inicial y primario bajo la modalidad de burbujas, que establece la alternancia de una semana presencial y otra virtual.

Otro tanto sucederá con los colegios secundarios, los que retomarán las clases a excepción de aquellas localidades o conglomerados urbanos con más de 30 mil habitantes, por lo que ciudades como Córdoba capital, Río Cuarto, Villa María o San Francisco, no retomaran la presencialidad.

También la Dirección General de Escuelas (DGE) de Mendoza anunció que a partir de mañana retomaran la educación presencial en los niveles inicial, primario y secundario bajo la modalidad de burbujas.

Santa Fe extiende la virtualidad  

Diferente es el caso de Santa Fe, donde ante el  agravamiento de los indicadores sanitarios, a través de una circular difundida por el Ministerio de Educación provincial en todos los establecimientos educativos, confirmó que entre el lunes 31 de mayo y el viernes 4 de junio “permanecerán suspendidas todas las actividades presenciales en el ámbito escolar”.

El anuncio fue ratificado ayer por el gobernador Omar Perotti, quien señaló que el dictado de clases será virtual y a distancia, y los docentes "podrán asistir” a los establecimientos para dar las clases de manera online o acompañar la entrega de materiales.

"Entendemos que no es la educación de calidad que queremos, pero es lo que podemos", remarcó Perotti, quien a mediados de abril había desconocido el pedido de suspensión de las clases presenciales, según lo dispuesto por el presidente Alberto Fernández en el marco de un DNU con el que se apuntaba a bajar el número de contagios.