Clemencia al Club de París. Y a la inflación, también
El ministro Martín Guzmán ya tiene lista la valija para después de Pascuas. Viajará a Europa por la deuda con el Club de París. Es la clave para avanzar, luego, con el FMI. Abril viene con todo en materia de inflación.
Poco después de Pascuas , el ministro de Economía, Martín Guzmán , volverá a hacer la valija; esta vez viajará a Europa por cinco días. Iniciará la gira en Berlín, el 12 de este mes y pasará por Roma, y Madrid para terminar en París, el 16 de abril. Se trata de los países principales miembros del Club de París. Pocos días en muchos sitios para pedir clemencia. Muy cerca del ministro sostuvieron que el objetivo de este viaje será “construir entendimiento sobre lo que la Argentina necesita para estabilizar su economía”. Traducido: conseguir apoyos de los principales accionistas del G7 (las naciones más industrializadas) y del G20 (grupo al que pertenece la Argentina, que fue el país más golpeado por la pandemia y sus propia recesión en el 2020 con una caída del PBI de casi 10% según el INDEC.
Con el Club de París hay que afrontar vencimientos por 2.400 millones de dólares entre abril y mayo pero ese dinero está garantizado con la ampliación de fondos que acaba de confirmar el FMI y por el cual la Argentina encontró en torno de 4.400 de dólares . El verdadero partido de fondo es lograr un acuerdo muy flexible con el FMI que permite al país patear hacia adelante vencimientos e ir devolviendo el dinero atado al crecimiento doméstico. Un objetivo muy ambicioso que recientemente se vio empañado por las declaraciones políticas.
Guzmán apuesta al Club de París para cerrar con el Fondo. Lo que pareciera ir revelándose es que este año, la Argentina podría manejar la situación en el frente externo financiero pero verdaderamente sin una refinanciación y en eso el Club de París sería clave, no se afrontar los vencimientos del 2022 cuando las elecciones y hayan pasado .
Deuda y el plan "Aguantar"
El economista Federico Poli , ex director en el BID, advirtió que en el exterior se percibe lo que él denominó “ el plan aguantar”. Según detalló control del tipo de cambio, pisar las tarifas y extender el control de precios para evitar cualquier inestabilidad antes de las elecciones. Y en este sentido consideró que los últimos movimientos del país en torno al Grupo Lima decidiendo no condenar el sistema político en Venezuela desorientaron en los Estados Unidos donde avalaron (como socio de fuste dentro del FMI) la posición de apoyar un acuerdo laxo con la Argentina . Hoy hay un poco más de dudas sobre ese punto.
Un acuerdo con el FMI más temprano que tarde le pondría horizonte al tema fiscal, donde se sabe los reclamos del sector privado se concentran en la necesidad de mejorar la administración de los recursos. Lo dijo muy claro recientemente Juan Vaquer , directivo de ACDE, al señalar que ya había pagado su impuesto solidario y que ahora le reclamaba toda la dirigencia política que hagan su trabajo “haciendo del Estados un Estado más eficiente y mejor que el que tenemos” . Fue una de las pocas voces privadas con nombre y apellido que se pronunciaron sobre este tema que genera, en voz baja, mucho más que quejas o críticas por parte del empresariado.
Lo otro que parece quedar en stand by de la mano de la espera de un acuerdo con el FMI es la política inflacionaria. Hasta ahora, las medidas para contener los precios son las prórrogas de precios cuidados y de programas que buscan apuntalar el consumo como Ahora 12 . Justamente el flamante mes de abril trae agitación en materia de suba de precios : aumentarán las naftas otra vez, las expensas, el transporte , se descongelan los alquileres , y las tarifas ya que acaban de realiza
r las audiencias públicas en torno a la suba de las tarifas eléctricas; las de gas ya concluyeron un puñado de días antes. Es decir, todos movimientos que impactarán directamente en los bolsillos y por eso ya hay algunos gremios que advierten que la modificación en el Impuesto a las Ganancias que ya discute el Senado para acelerar su aprobación en ley, podría licuarse rápidamente en dos o tres cuotas próximas de las paritarias en curso.
Tarifas, el impacto de las subasLa distribuidoras eléctricas reclamaron unos 20.000 millones de pesos para sostener el funcionamiento del sistema y mejorar el servicio argumentando que hace más de una década que no giran dividendos y que reinvierten las utilidades. Por ejemplo, en el caso de Edenor eso implicaría una suba promedio del 31% para los 3 millones de clientes de la distribuidora, un 28% para los residenciales.
Esa compañía remarcó que invirtió 1.700 millones de dólares desde 2013 y que redujo un 63% la duración de los cortes de luz. Por supuesto que en el equipo económico las cuentas que hacen son absolutamente otras. Lo mismo pasa con las gasíferas, donde por ejemplo en pública Metrogas solicitó un aumento audiencia del 15%pero aún no se definió el porcentaje de manera oficial.
Esa suba impactará en mayo. En cualquier caso, mientras corren los minutos de descuento para saber de cuánto será la suba que, según Guzmán “acompañara la inflación” lo cierto es que el aumento llegará y su efecto dominó se sentirá sobre toda la economía. En materia de inflación, también se ruega: clemencia.