Comedias románticas más allá de los lugares comunes en HBO Max
Cuatro películas que sí, son románticas: la gente se enamora y todo eso. Pero van mucho más allá, crean cosas nuevas, llevan sonrisas y felicidades varias. Todas, dicho sea de paso, películas de autor.
Para muchos, Embriagado de amor es "la mejor película con Adam Sandler". Bueno, es de las mejores. También es de las mejores películas de Paul Thomas Anderson, uno de los realizadores más importantes de estas décadas. El resultado es la historia de un tipo con una fábrica de absurdos objetos de plástico, solitario y con demasiadas hermanas que se enamora de una mujer perfectamente compatible con él (una bellísima Emily Watson). Sería poco ético contar las vueltas de la historia, los momentos hilarantes y emotivos, o la genial participación de Phillip Seymour Hoffman. Ya, un clásico moderno del cine (y muy divertida).
Amabilidad, tu nombre es Tom Hanks. Un tipo sin trabajo se reinventa, vuelve a la Universidad, recupera una forma de la libertad y se enamora (de Julia Roberts, bueno, es más que lógico). Una película que gira alrededor de la gente común y de cómo a veces la vida se parece a un cuento de hadas. ¿Por qué es buenísima? Por eso, porque nos introduce tranquilamente en el mundo de sus protagonistas, porque trata sobre la felicidad y porque los actores hacen eso tan difícil que es parecer "gente común"- El filme con y de Tom Hanks merece verse.
El amor cuesta caroHay que ver a los hermanos Coen, incluso con sus películas más aparentemente dramáticas, como humoristas y satiristas. El amor... es una de las más evidentes, con su abogado de divorcios (George Clooney) atrapado en las redes de una cazafortunas (Catherine Zeta-Jones) está llena de vueltas de tuerca, de ritmo caricaturesco (a veces parece un dibujo animado) y su muy sólido guión. Incluso así, la película es una comedia romántica que aprovecha las herramientas del género para hacer otra cosa, y en eso radica su principal atractivo.
Mi súper ex-noviaEl inventor de la comedia de "gente común metida en un problema relacionado con lo fantástico" Ivan Reitman logra aquí algo más que una comedia romántica: se ríe de la batalla de los sexos y del mundo de las citas con este pobre Luke Wilson enamorado de una superheroína (Uma Thurman) un poco demasiado tóxica, y de la venganza de la señorita ante la previsible ruptura. Llevar todo al extremo es una de las mejores herramientas que tiene el creador de Los Cazafantasmas para la risa y el amor.