El Ministerio de Economía, encabezado por Luis Caputo, modificó los montos a partir de los cuales los movimientos financieros deben ser reportados e investigados por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA). Las nuevas disposiciones implican una suba significativa de los umbrales de monitoreo para transferencias, acreditaciones y operaciones de consumo, tanto en cuentas bancarias como billeteras virtuales, sociedades de bolsa y comercios.

 

Nuevos límites para transferencias entre bancos y billeteras virtuales

Hasta ahora, cualquier acreditación o transferencia superior a $2.000.000 en una billetera virtual debía ser informada al organismo tributario. Con la actualización, el nuevo piso se eleva a:

$50.000.000 para personas físicas. $30.000.000 para personas jurídicas.

Esto implica que una persona podrá enviar, recibir o acreditar en su cuenta virtual hasta 50 millones de pesos sin que esa operación deba ser automáticamente informada a ARCA.

 

Límite para tenencias en sociedades de bolsa (Alycs)
 

También hubo modificaciones en el caso de las cuentas comitentes abiertas en sociedades de bolsa o agentes de liquidación y compensación (Alycs), donde anteriormente no existía un umbral de control, es decir, cualquier monto podía ser observado por los organismos tributarios.

A partir de ahora, los nuevos topes establecidos son:

$100.000.000 para personas físicas. $30.000.000 para personas jurídicas.

Estas tenencias deberán ser informadas si se superan esos valores.

 

ARCA: más noticias

 

Compras del consumidor final
 

En el ámbito del consumo, se eliminaron los topes que obligaban a identificar al comprador en operaciones de cierta magnitud. Antes, cualquier compra en efectivo superior a $250.000 o compra con otros medios por más de $400.000 requería la identificación del cliente.

Con la nueva resolución, se podrá comprar hasta $10.000.000 sin necesidad de aportar datos personales, siempre que se trate de operaciones de consumidor final.

Estas medidas fueron justificadas por el Ministerio como una adecuación a la inflación acumulada en los últimos años, que había dejado desactualizados los montos originales. Según fuentes oficiales, los nuevos topes buscan reducir la burocracia en operaciones habituales y evitar el exceso de reporte de movimientos genuinos dentro del sistema económico formal. Sin embargo, la medida también generó críticas de sectores que advierten sobre el posible debilitamiento de los mecanismos de fiscalización en un contexto de alta informalidad.