El agro liquidó USD1.052 millones este último miércoles de mayo, con lo que el tercer Programa de Incentivo Exportador (PIE) acumuló USD5.086millones. Esto permitió al Banco Central comprar USD 451 millones, el récord diario en lo que va de 2023. De este modo, en el transcurso de mayo pudo adquirir un total de USD850 millones. Con este resultado, no se alcanzó el objetivo de liquidaciones sojeras –que era la meta original del Gobierno-, ya que de este resultado también contempla la liquidación de sorgo, cebada, maíz y -en especial en las últimas jornadas- girasol, además de bienes de economías regionales, pero sí le permite celebrar que el programa supero la cota de USD5.000 millones a pesar del derrumbe del precio internacional de la soja.

Cabe aclarar que, el Gobierno extendió hasta este viernes la cotización estímulo de $300 para la soja y sus derivados para compensar los dos feriados de la semana pasada. Sin embargo, el agro adelantó liquidaciones para este miércoles con ventas en T+1 y T+2, por lo que se esperan ventas menores para las próximas jornadas. “Queda un residual” para los próximos días, confirmaron fuentes del sector a BAE Negocios.  Para el resto de los productos, el PIE continúa hasta agosto con el tipo de cambio preferencia.

Esta liquidación récord llegó al Banco Central como un regalo en su 88° Aniversario, en momentos en los que enfrenta fuertes cuestionamientos por las intervenciones para comprimir la brecha cambiaria mientras a las empresas les cuesta acceder a importaciones para sostener la producción,  y también por el bajo nivel de reservas netas que hasta la semana pasada se ubicaban en negativo por USD1.455 millones. Con estas compras, el Banco Central no solo mejoró su posición, sino que además ganó poder de fuego cuando hasta ayer no se esperaba que se alcanzara la cota de los USD 5.000 millones.

En este sentido, desde Ecolatina remarcaron que “El objetivo inicial establecido de USD 5.000 M se refería únicamente a las liquidaciones del complejo sojero. Por ende, podemos inferir en base a declaraciones de funcionarios que el verdadero valor objetivo se ubicaba entre USD 7.000 M y USD 9.000 M al contemplar también las liquidaciones de economías regionales.

De cara al resto del año, el panorama no cambia sustancialmente incluso si el resultado de mayo se duplicó de un día para el otro. Con USD850 millones comprados, mayo cerró por encima de los USD784 millones de igual mes del año pasado, pero con una fracción menor de los USD2.089 millones de mayo de 2021. Es que sigue siendo una suma escueta para tratarse de la "temporada fuerte" de ingreso de divisas ya que se trata de una cifra menor de cara a las necesidades de importación del orden de los USD6.000 millones mensuales para sostener el nivel de actividad. De hecho, la señal no bastó para contener la brecha, que este miércoles volvió a ampliarse al 105,6%.  

Como adelanto este medio, el resultado de la tercera edición del dólar soja estuvo influenciado por partida doble por la caída en los precios internacionales de los granos. En particular, la fuerte retracción de la soja dinamizo las liquidaciones conforme se acercaba a los USD 500 por tonelada como una forma de desprenderse de los porotos en un apuro por stockearse de insumos. Ya con la cotización en la zona de los USD475 y sin señales de sostén, el diferencial en pesos entre el dólar soja y el dólar mayorista le permite a la industria del crushing liquidar divisas y compensar el riesgo de tener que importar más oleaginosas más adelante, con el potencial atractivo de que sigan cayendo y encima estén más baratas.