El Congreso de Brasil aprobó una enmienda constitucional que otorga al presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, 168.000 millones de reales adicionales (US$32.000 millones) para gastar el próximo año, lo que le permitirá pagar los programas de bienestar social y otras promesas de campaña.

Los miembros de la Cámara Baja aprobaron el proyecto de ley por 331 a 163 votos en una segunda ronda de votación. Como enmienda constitucional, requería el respaldo de al menos 308 legisladores en dos vueltas. Recibió el respaldo de los senadores inmediatamente después, informa la agencia Bloomberg.

La enmienda aumenta el tope de gastos del país, que ata el incremento de los gastos públicos a la tasa de inflación, en 145.000 millones de reales, los que se utilizarán principalmente para financiar subsidios en efectivo a los pobres y otros programas sociales. También permite que el Gobierno entrante dirija 23.000 millones de reales a inversiones que no estarán sujetas a la regla fiscal en caso de que la recaudación de impuestos supere las expectativas.

 

Estrategia

La aprobación es una victoria política para Lula, que inicia su tercer mandato con un amplio margen presupuestario, pero también un motivo de preocupación para los inversores que temen por la sostenibilidad de las finanzas de Brasil.

En declaraciones realizadas después de la aprobación del proyecto de ley en la Cámara Baja, el ministro de Hacienda entrante, Fernando Haddad, reiteró las promesas de revelar pronto una estrategia fiscal “creíble” para disipar tales preocupaciones.

El proyecto de ley solo se aprobó después de que la Cámara de Diputados acortara la duración de la exención de gastos de dos años a un año. Por esa razón, el texto volvió al Senado para dos rondas adicionales de votación.

 

Presupuesto

El equipo de Lula también tuvo que ceder a las exigencias del presidente de la Cámara Baja, Arthur Lira, para asegurar suficientes votos a favor del proyecto de ley. Lira se mostró molesto por una decisión de la Corte Suprema que consideró inconstitucional el mecanismo adoptado por el Congreso para asignar fondos públicos.

Los legisladores acordaron un sistema diferente que comparte el control de dichos fondos con el Poder Ejecutivo.

La aprobación del proyecto de ley de gastos allana el camino para una votación sobre el presupuesto del próximo año y para que Lula nombre más miembros del gabinete, a partir del jueves. Toma posesión el 1 de enero de 2023.