A pesar de las fuertes bajas de los últimos días, analistas creen que la caída de los mercados, a causa de la incertidumbre que genera la expansión del coronavirus por el mundo, todavía está a medio camino. Habrá rojos para rato, auguran los especialistas.

Un informe del Deutsche Bank indica que el derrape de las Bolsas recién podría tocar su piso "en algún momento del segundo trimestre".

Aún se desconoce cuál terminará siendo el impacto del coronavirus en la economía global. Por lo pronto, calificadoras y bancos ya revisaron a la baja sus proyecciones para este año. La agencia Moodys recortó el viernes 0,3 puntos porcentuales el crecimiento esperado en 2020 para los países del G-20, a 2,1%. La calificadora ahora prevé que el PBI de China crezca un 4,8% anual, contra el 5,1% de la estimación previa; mientras que para Estados Unidos proyectan una recuperación de la actividad de 1,5%, por debajo del 1,7% anterior.

Moodys señala que el temor al contagio del coronavirus reducirá la actividad comercial y el consumo, y que cuanto más tarde en reanudarse la actividad normal, mayor será el impacto en la economía.

"Los riesgos de recesión global han aumentado. Cuanto más tiempo el brote afecte la actividad económica, el shock a la demanda prevalecerá y conducirá a una dinámica recesiva", afirmó la agencia en un comunicado.

El temor a una recesión global explica la aversión al riesgo de las últimas semanas. Con inversores escapándole a los activos considerados más riesgosos, el S&P Merval acumuló un desplome de 8,7% en 15 días.

Según señala el analista de Rava, Ariel Guzmán, existe "mucha incertidumbre sobre hasta cuándo habrá que ser más precavidos a la hora de invertir".

"Las perspectivas no son muy alentadoras ya que aún no se vio el impacto en la economía real de la expansión del coronavirus. En el plano local, la semana entrante los inversores estarán expectantes a la oferta sobre la reestructuración de la deuda, mientras que la renta variable seguirá dependiendo de lo que pase en el exterior", indicó.

La Bolsa neoyoquina cayó mucho pero, según los analistas, aún estaría a medio camino de tocar un piso. El S&P 500 acumula una caída de más de 10% desde el 19 de febrero pasado, cuando el coronavirus comenzó a expandirse rápido fuera de las fronteras chinas, y el Deutsche Bank espera una baja de entre 15 y 20% antes de que se inicie el rebote.

"La corrección del índice sigue una dinámica crítica. El porvenir de las economías se percibe más incierto que de costumbre. Son responsables de esto el coronavirus, el devenir de la guerra comercial, la transformación/desaceleración de la economía china, y el apalancamiento a nivel global", señalan desde Delphos Investment.

Y agregan: "Las señales técnicas resultan por demás ambivalentes. Señales que en otras oportunidades serían casi indiscutiblemente leídas como de sobre venta, hoy pueden estar evidenciando la vulnerabilidad del mercado".