Cristina tensa la relación con Alberto en el marco de una alianza cada vez más desdibujada

Con su discurso confrontativo, la vicepresidenta sigue abonando el camino de no retorno que pone en jaque al Frente de Todos.

haranda

Con el discurso con el que dejó inaugurada la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat) en el que le mandó un mensaje de neto corte confrontativo al Presidente Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner llevó la interna del Frente de Todos (FdT) a límites intolerables, abonando de esa manera un camino que pareciera de no retorno y que pone en jaque a esa alianza de Gobierno.

Las palabras de la vicepresidenta fueron vertidas en la previa a que el INDEC diera a conocer el índice inflacionario que marcó un nuevo récord al situarse en el 6,7% y en medio del recalentamiento social en un contexto de crisis socioeconómica que bien podría habilitar un horizonte de inestabilidad política.

En ese contexto, Cristina dejó dos frases que parecieron tener como inevitable destinatario al mandatario nacional y su Gobierno, al sostener por un lado, que el "que te pongan una banda y te den el bastón no significa que te den el poder".

La titular del Senado, cuya relación con el jefe de Estado pareciera haber entrado en un callejón sin salida, dijo además que "las desigualdades no nacen por un orden natural" sino que "son producto de decisiones políticas o de falta de ellas".

Los dardos de Cristina fueron lanzados en medio de rumores que dan cuenta que el mandatario nacional, quién pareciera haberse abroquelado en su núcleo más refractario a la vicepresidenta, tomaría en los próximos días la decisión de eyectar de sus cargos a funcionarios kirchneristas que se muestren a disgusto con las políticas económicas aplicadas por el Ejecutivo nacional. 

Con el respaldo a su ministro de Economía, Martín Guzmán, quién se encuentra en el ojo de la tormenta, entre otras razones, por el acuerdo alcanzado con el FMI por la deuda contraída durante el macrismo y ante el descontrol inflacionario que impacta de lleno en los bolsillos de los trabajadores, da la impresión que Alberto Fernández habría tomado la decisión de impulsarse hacia adelante, desoyendo los cuestionamientos que parten desde varios sectores del Fdt, pero también de dirigentes cercanos a él.

Dispuesto a no negociar el rumbo político con Cristina, con la cual el diálogo se encuentra dinamitado, ni con el kirchnerismo duro y La Cámpora, el Presidente y su debilitado Gobierno enfrentan un escenario cada día más complejo.

Pese a ello, sus funcionarios más cercanos no dejan de practicar el ejercicio de la pirotecnia verbal con las que siguen abonando el camino de la ruptura, y para el caso, el titular de la cartera de Seguridad, Aníbal Fernández, volvió hoy a apuntar contra un hombre del riñón del kirchenirsmo como lo es el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti.

"No es saludable que Feletti se muestre crítico con las medidas económicas. Lo conozco demasiado y sé que no lo haría con vocación de estorbar, lo ha hecho para sumar, pero esas cosas no suman" con lo que "termina siendo un estorbo", señaló el ministro.

Otro dirigente de peso que salió a hablar fue Agustín Rossi, quién se viene mostrando en sintonía con la Casa Rosada, el que al referirse a la tensión entre Alberto y Cristina, pidió bregar por la unidad entre las partes en pos del futuro de la coalición gobernante.

"Para ganar en 2023 hay que fortalecerlo" al Presidente porque aseguró que “si el Frente de Todos se rompe, el macrismo gana en primera vuelta”, destacó el exministro de Defensa, quién dijo no creer "que la disyuntiva sea Alberto o Cristina", sino que lo ideal "es que sea Alberto y Cristina".

"No creo que sea un problema de teléfonos ni de ninguna otra consideración, sino un problema político, atravesado por cuestiones de poder", indicó el santafesino, quién también y pese a reconocer que "hay que resolver el tema de los ingresos en los sectores no formales y de la inflación", salió a respaldar la tarea llevada adelante por Guzmán.

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