Cuatro Beatles por Cuatro en Disney+
Los Beatles cambiaron no sólo la música popular (y algo más) de la última mitad de siglo sino casi toda la cultura pop. Aquí van varios documentales que pertenecen a la grilla de Disney+ y que permiten revivir esa revolución feliz que aún genera olas.
Bueno, a ver: si tiene ganas de pasarse un buen rato gritando con el televisor, este documental sobre cómo los Beatles se convirtieron en estrellas mundiales y conquistaron los Estados Unidos es especial. No sólo tiene una cantidad gigantesca de material de archivo nuevo, más entrevistas pertinentes, sino que la alegría gigantesca de esos cuatro pibitos de algo más de veinte años traspasa la pantalla. No es una película nostálgica para nada: es simplemente el registro de un momento en el que el mundo necesitaba felicidad y la obtuvo.
Probablemente el monumento documental a los Beatles: la preparación y la grabación de Let it Be. Pero es mucho más que eso: es la historia de cómo se disuelve el grupo, de sus tensiones, de dónde estaba el norte cretivo, del puro juego con la música. Es, sobre todo, un documental sobre la creación artística y su relación con el mundo (moderno). Todo con material restaurado a nuevo digitalmente por Peter Jackson. Son unas cuantas horas pero uno no se cansa de nada. Sólo ver cómo crean "Get Back" vale todo el metraje. Dijimos "monumento" y no exageramos un milímetro.
Let it Be
Si Get Back es la historia detrás, esta es la obra delante. Hace mucho tiempo que esta película documental de y sobre los Beatles no está disponible, y es un auténtico pedazo de la historia del siglo XX. Como es obvio, es el complemento perfecto de Get Back (y su justificación), pero es además un retrato de cómo estos muchachos, en muy pocos años (siete entre With the Beatles y este disco, nada más) lograron una revolución y comenzaron una vida completamente diferente (claro que célebres y millonarios, pero diferente).
McCartney 3,2,1En seis episodios, Paul McCartney charla con Rick Rubin sobre música, los Beatles, otros artistas y millones de cosas más, además de tocar. Diseñada como una especie de charla íntima, en blanco y negro, muy divertida y sin divismos, es un complemento perfecto a todos los demás documentales, sobre todo porque funciona como una especie de "genealogía" de la música beatlesca, además de reflexionar sobre la gran música pop, esa que nos definió durante el siglo XX y todavía sigue. Como Sir Paul.