El caso de Richard Jewell

Clint Eastwood ya no es un cineasta sino un recurso natural. A los 90, estrenó El caso de Richard Jewell, una película extraordinaria basada en un suceso real: un tipo que salva gente de un atentado terrorista y termina involucrado por una mala praxis periodística. El cine de Eastwood es moral: hay una divisoria clara respecto de qué debe hacerse y qué no, y sus héroes, pase lo que pase, hacen lo que se debe, siempre. Aquí no hay uno sino varios personajes en esa situación. La película es brillante, tersa, elegante y contundente. Eastwood carece de problemas para filmar lo que quiere. El sábado a las 22 por HBO Plus.

Congo

Quien entró al cine Metro a ver Congo, una película de aventuras sobre unos monos asesinos que transcurre en -bueno- África, quizás pensó que se trataba de algo menos disparatado de lo que es: un filme realizado a imagen y semejanza de las aventuras exóticas de los años 30 pero con la tecnología y el ritmo de los años 90. Muy divertida, esta película de Frank Marshall (productor histórico de Spielberg y Lucas, responsable de ¡Viven!, gran filme sobre el Milagro de los Andes) es un homenaje a la aventura más pura, a ser chicos para siempre. Viernes, 22, FoxClassics.

Alto voltaje

El grado de disparate (autoconsciente) de esta película la eleva al estadio de gran comedia surreal. A Jason Statham le sacan el corazón y le ponen una batería que requiere constantes choques eléctricos, que debe conseguir mientras intenta recuperar la víscera. Desde el comienzo se asume como un videojuego, mucho más extremo que la ya extrema Crank, precuela de esta locura. La acción está muy bien filmada más allá del vértigo, lo que, lateralmente, la vuelve casi cine experimental. Imparable. Jueves, 22, FXM.

Policías de repuesto

Antes de dedicarse a la política y la corrección  política, Adam McKay fue un gran creador cómico con su cómplice Will Ferrell. En esta película sobre dos policías totalmente desquiciados (Ferrell y Mark Wahlberg) que se lanzan a desplazar a dos supertipos (interpretados por Dwayne Johnson y Samuel Jackson a pura parodia) en un caso de corrupción hace estallar -literalmente- todos los lugares comunes de la acción cinematográfica. Los diálogos son surrealismo puro, dignos de los Hermanos Marx. Miércoles, 22,45, HBO Pop.