El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil dispuso establecer una vigilancia policial alrededor de la casa donde cumple prisión domiciliaria el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022) por riesgo de fuga, a horas de que comience mañana, 2 de septiembre, la parte final del juicio por intento de golpe de Estado.

Así lo dispuso el juez instructor del proceso, Alexandre de Moraes, en base a un informe de la Fiscalía General y de la policía penitenciaria de la ciudad de Brasilia, que señaló varios "puntos ciegos" en el perímetro de la residencia de Bolsonaro, quien vive en un condominio cerrado, informa la agencia oficial china Xinhua.

El magistrado también autorizó inspecciones a todos los vehículos que salgan del domicilio del exmandatario, quien se encuentra con tobillera electrónica.

En un documento, el fiscal general Paulo Gonet mencionó que las investigaciones recientes demostraron la cercanía del expresidente con "líderes extranjeros", debido a que en un allanamiento se le encontró en el archivo de un teléfono móvil a Bolsonaro un documento pidiendo asilo en la vecina argentina supuestamente para evitar se juzgado.

Bolsonaro fue ubicado días atrás en prisión domiciliaria ya que Moraes consideró que había riesgo de fuga hacia una embajada extranjera, en el contexto del lobby realizado por su hijo Eduardo Bolsonaro, diputado que se radicó en Estados Unidos para solicitar al Gobierno de Donald Trump disponer sanciones económicas y políticas contra Brasil para defender a su padre.

En una carta, Trump dijo que aplicó un arancel del 50% a los productos brasileños en oposición al juicio que se le sigue por golpismo a Bolsonaro, argumento que Brasil consideró un "chantaje" y un "ataque a la soberanía" del país.

Bolsonaro está acusado de planificar un golpe de Estado con parte de su gabinete en 2022, luego de haber perdido las elecciones generales ante el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Con información de Europa Press