El Banco Central habilitó este jueves en su reunión de Directorio a los bancos para que les abran "cuentas de exportadores" con intereses especiales a los organismos estatales que hayan liquidado divisas desde diciembre. De esta manera, podrán pesificar sus tenencias en dólares a tipo de cambio oficial y hacerse de los mismos intereses que se les reconoce a los exportadores por sus dólares.

La resolución generó zozobra en el mercado por temor a que se trate del puntapié para una pesificación de los depósitos en dólares del sector, rumor enfáticamente desmentido por las autoridades.

Técnicamente, de lo que se trata la Comunicación A 7732, es de una habilitación para que los organismos públicos que hayan recibido préstamos del exterior y tengan depósitos en dólares los vendan y conserven los rendimientos que tenían, beneficio que se extiende sobre las ventas hechas desde diciembre.

En efecto, la normativa expresamente señala: “Admitir, que los entes del sector público no financiero puedan acreditar en las ‘Cuentas especiales para exportadores’ –previstas en el punto 3.14. de las normas sobre “Depósitos de ahorro, cuenta sueldo y especiales”– importes por hasta el monto en pesos proveniente de las liquidaciones, realizadas a partir del 1.12.22, de financiaciones y/o aportes no reintegrables de organismos internacionales, sus agencias asociadas, bancos multilaterales de desarrollo o agencias oficiales de crédito.”

Así, podrían engrosar las reservas netas saldos del récord de créditos del BID que el país recibió el año pasado, los créditos desembolsados por el BCIE y el CAF por USD 680,4 millones la semana pasada, entre otros.

Políticamente, la idea es unificar todos los dólares que distintos entes públicos hayan recibido en conceptos de créditos de organismos multilaterales en manos del Banco Central y no desperdigados en decenas de cuentas bancarias de las unidades ejecutoras de los créditos internacionales. Al venderles estos dólares al Banco Central que hasta ahora se computan como parte de las reservas internacionales brutas, la autoridad inmediatamente incrementa las reservas netas.

 

De esta manera, el Banco Central genera las condiciones para que los entes públicos adelanten la liquidación de sus dólares al primer trimestre para así poder cumplir con la nueva meta de acumulación de reservas netas. Meta que es necesaria para que, en junio, el Fondo Monetario le desembolse unos 800 millones de dólares más al país. De lo contario, cada unidad ejecutora solo vendería los dólares en la medida en que haya terminado de ejecutar el tramo previo del crédito.

En segunda instancia, hacerse de estos dólares incrementa el poder de fuego del Banco Central para seguir defendiendo el dólar oficial en el Mercado Único Libre de Cambios (MULC), en el que en esta breve semana tuvo que desembolsar 588 millones de dólares por la falta de oferta privada.

 

Al tratarse de una habilitación, Sergio Massa y Miguel Pesce podrán negociar con cada uno de los organismos del sector público nacional para que efectivamente liquiden los dólares de las cuentas bancarias e incluso las provincias podrían hacerlo conforme a la normativa. En ningún caso la reglamentación del Directorio de Banco Central obliga a una pesificación compulsiva.

Fuentes entendidas explicaron a este medio que la nueva normativa es complementaria a la Comunicación A 7667 de enero pasado que ya había habilitado a los bancos a crearles estas cuentas especiales de exportadores a los organismos beneficiarios de créditos extranjeros.

“El Gobierno, en una medida de perfeccionamiento de la administración, dispuso que las unidades ejecutoras pueden liquidar la totalidad del crédito y depositar los pesos en una cuenta remunerada al valor del dólar oficial. Esto permite mantener el valor del crédito en su moneda original mientras se va ejecutando los gastos que se pagan en pesos.  La norma de este jueves aclara que las unidades ejecutoras que liquidaron los créditos antes del primero de diciembre también pueden depositar el saldo que mantengan en pesos en estas cuentas remuneradas”, explicaron fuentes oficiales a BAE Negocios.

En tanto, Salvador Vitelli de Romano Group evaluó que: “Se manda al mercado una señal espantosa, de pesificación de flujos en dólares, por muy poco dinero. Si se mira la evolución de los depósitos del sector público en dólares del 30 de noviembre como proxy de esos flujos, puede verse que el saldo de depósitos aumentó solo 129 millones de dólares, aunque el flujo entrante puede haber sido algo mayor. Es el equivalente a uno o dos días de ventas del Banco Central en el MULC”.