El Gobierno convirtió al Banco Nacional de Datos Genéticos en un organismo desconcentrado
La oposición denunció una amenaza a su misión histórica. Una decisión que despierta viejos fantasmas. Federico Sturzenegger celebró la medida
El Gobierno nacional oficializó la conversión del Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) en un organismo desconcentrado que pasará a depender de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, según el Decreto 351/2025 publicado hoy en el Boletín Oficial. La medida, firmada por el presidente Javier Milei y el ministro del Interior, Guillermo Francos, busca “fortalecer las capacidades institucionales del BNDG” a través de una nueva estructura administrativa.
Mientras el oficialismo defiende la transformación como una reorganización administrativa, sectores vinculados a los derechos humanos consideran que debilita la misión del BNDG y pone en riesgo el proceso de restitución de identidad que aún involucra a más de 300 personas.
La opinión de Federico SturzeneggerEl ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger, justificó el cambio en términos de eficiencia: “Un organismo desconcentrado mantiene su independencia funcional, pero descansa en el back office centralizado para su administración. Esto redunda en importantes ahorros sin afectar en lo más mínimo el cumplimiento de las tareas del organismo”. En contraste, señaló que un organismo descentralizado “duplica todo el back office: contabilidad, liquidación de sueldos, compras, una burocracia infernal”.
Creado en 1987, el BNDG cumple un rol clave en la identificación genética de personas, especialmente en causas vinculadas al terrorismo de Estado durante la última dictadura. Su trabajo permitió restituir la identidad de 138 personas apropiadas, en colaboración con Abuelas de Plaza de Mayo y otros organismos de derechos humanos.
El decreto instruye a la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología a reglamentar la nueva estructura organizativa y funcional del BNDG en un plazo máximo de 90 días.
Rechazo opositor y acusaciones de “complicidad”La reacción de la oposición no se hizo esperar. Hijo de militantes montoneros desaparecidos, Eduardo “Wado” de Pedro, actual senador de Unión por la Patria, denunció que la medida “quita autonomía” al BNDG y acusó al Gobierno de Milei de “complicidad con el robo de bebés”.
“El BNDG es un organismo reconocido internacionalmente que devolvió la identidad a 138 argentinos apropiados durante la última dictadura militar”, escribió De Pedro en redes. Y agregó: “Esto ya no es solo negacionismo. Es complicidad con quienes robaron bebés y aún hoy les niegan su verdadera identidad”.
Él mismo recuperó su identidad en 1987 gracias al trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo y el BNDG.
La legisladora porteña Victoria Montenegro también fue apropiada durante la dictadura, criada por un militar y recién recuperó su identidad en el 2000. Ahora, se sumó a las críticas al decreto: “Hoy el Gobierno de Javier Milei le quitó autonomía al Banco Nacional de Datos Genéticos, herramienta esencial para que las Abuelas de Plaza de Mayo puedan encontrarnos a quienes fuimos robados a nuestras verdaderas familias durante el terrorismo de Estado”.
Montenegro vinculó la decisión con otras medidas recientes, como la degradación de la Secretaría de Derechos Humanos y del Archivo Nacional de la Memoria. “Ellos van por la impunidad, nosotros no se lo vamos a permitir”, advirtió.