CONGRESO

El Gobierno envía el proyecto para limitar los fueros y el peronismo lleva el escándalo de Kueider al recinto

De qué serviría el proyecto de los fueros y cómo se relaciona con el caso de Kueider. Argumentos cruzados, acusaciones y contradicciones

DRomero

El Gobierno anunció que dentro del temario de extraordinarias incluirán un proyecto para limitarle los fueros a la política, tras el escándalo que se desató por la detención del senador Edgardo Kueider en la Triple Frontera. El proyecto todavía no había terminado de redactarse para el fin de semana, aunque en Balcarce 50 niegan que haya sido una iniciativa improvisada, motivada por la noticia del legislador. Lo que queda claro es la necesidad del Gobierno de volver a abanderarse en contra de la corrupción y la casta, algo que empezó a perder peso tras las acusaciones por caída de Ficha Limpia y la relación que mantenían con el procesado en Paraguay. Mientras se demora el proyecto, el peronismo en el Senado redobló la apuesta con el pedido de expulsión de Kueider y el oficialismo, incómodo, debe definir una posición esta semana.

Si bien no trascendieron todavía detalles del proyecto, lo que aseguran desde el Gobierno es que se tratará de una limitación a los fueros, bajo el marco de la ley 25.320. No podrían, de otra manera, puesto que la existencia de los fueros está protegida por la Constitución Nacional: “Ninguno de los miembros del Congreso puede ser acusado, interrogado judicialmente, ni molestado por las opiniones o discursos que emita desempañando su mandato de legislador”, establece el artículo 68, al que le sigue: “Ningún senador o diputado, desde el día de su elección hasta el día de su cese, puede ser arrestado; excepto el caso de ser sorprendido in fragante en la ejecución de algún crimen que merezca pena de muerte, infamante, u otra aflictiva”.

“Puro humo”, se le escuchó decir durante la semana a tanto legisladores como a juristas en los pasillos parlamentarios, cuando se dio a conocer la intención de llevar adelante este nuevo proyecto del oficialismo. Lo cierto es que en Casa Rosada, durante los vaivenes sobre el llamado a extraordinarias, nunca habían dejado trascender esta iniciativa hasta el miércoles pasado, cuando se destapó la olla sobre Kueider. Fuentes gubernamentales le negaron a BAE Negocios rotundamente que los dos temas estén relacionados e insisten con que, en realidad, se trataba de una idea anterior a que encuentren al senador con más de 200.000 dólares sin declarar en el Puente de la Amistad.

“La Ley de Fueros establece que si el legislador, funcionario o magistrado no concurriera al llamado a indagatoria se deberá solicitar su desafuero, remoción o juicio político. Ese debe ser girado a la comisión de Asuntos Constitucionales (que preside Kueider, irónicamente), y esta debe emitir dictamen en 20 días y tratarlo como Cámara en 180 días, aún sin dictamen. Ahora bien, ¿qué pretende cambiar sobre esto el Gobierno? No se entiende. Lo de Kueider, además, no procede el desafuero porque fue requerido por la Justicia de otro país", interpretaron especialistas en diálogo con este medio. En este sentido, corresponde la expulsión de la inhabilitación moral sobreviviente, lo cual requiere de dos tercios del recinto de la Cámara correspondiente.

Mientras que el presidente Javier Milei y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner se pasan la responsabilidad del Kueider-gate en redes sociales, el kirchnerismo del Congreso empezó a girar papeles para dejarlo fuera de su puesto. Primero, el senador anticipó que iba a pedirse licencia, mientras permanece en prisión domiciliaria en Paraguay, pero el pedido no ingresó formalmente. Cuando eso suceda, deberán votarlo en una sesión. Mientras tanto, la bancada que conduce José Mayans (de la cual perteneció inicialmente Kueider) le pidió a Victoria Villarruel una sesión para expulsarlo, bajo la argumentación de que, al tratarse de asuntos internos, no necesitan de un llamado a extraordinarias para poder hacerlo.

 

Cristina Kirchner reclamó al Gobierno que dé quorum para tratar la expulsión de Edgardo Kueider del Congreso

La remoción de Kueider dejaría lugar a otra banca peronista, ya que en su lugar ingresaría la camporista Stefania Cora. En un contexto en el que el oficialismo quedaría aún más debilitado en la Cámara alta, es probable que intenten frenar su expulsión. Solo el kirchnerismo lo condenó públicamente y, por su parte, el Gobierno se desligó de la polémica, derivándole el problema a CFK y a la Justicia, mientras se jacta de luchar contra la corrupción con ilustraciones de leones y ratas que difunde Milei en redes. 

Lo cierto es que, si UxP consigue las 15 bancas que necesita para desplazarlo, logrará instalar la vara de que un senador con causas abiertas es digno de ser expulsado: más de uno debería ser removido, en ese caso, puesto que por ejemplo Oscar Parrilli (UxP) mantiene una causa abierta del Memorándum con Irán, así como también Anabel Fernández Sagasti (también de UxP), por una causa en la que investigan fondos de BIFISA. En ese sentido, los demás sectores políticos, también con expedientes irresueltos, se mantuvieron reservados ante el caso Kueider y no expresaron su repudio, como lo hizo el kirchnerismo. Cabe destacar que sería un argumento incluso más riguroso del que utiliza el PRO para defender su proyecto de Ficha Limpia, en el cual proponen limitar candidaturas a condenados en segunda instancia. En esa línea, de La Libertad Avanza alegaron algunos que se corría el riesgo de proscribir a quienes tienen “causas inventadas”. Argumentos cruzados.

En un contexto en el que los espacios “dialoguistas” denunciaron al oficialismo de mantener pactos con los K para que Martín Menem se sostenga frente a la presidencia de la Cámara; que trabaron el desarrollo de Ficha Limpia por un acuerdo con Cristina en pos de acordar el armado de la Corte Suprema de Justicia; y que, además, sospechan de que el Gobierno coimeó a Kueider para votar a favor de la Ley Bases, el peronismo ahora decidió ir a por todo por el caso del entrerriano e impulsaron, con Santiago Cafiero a la cabeza, una comisión investigadora para “esclarecer” si la Ley Bases fue aprobada de manera irregular. Se llama “Comisión Investigadora sobre Coimas, Cohechos, Sobornos y Pagos Irregulares”, firmado por quince legisladores de UxP, inclusive German Martínez, Victoria Tolosa Paz, Paula Penacca y Juan Manuel Pedrini.

Los trapos saldrán al sol el jueves, para cuando UxP pidió la sesión para remover a Kueider. Para ese entonces, el proyecto de los fueros ya se habrá dado a conocer: si bien fuentes de Casa Rosada le admitieron a este medio que no habían terminado de redactarlo para el jueves pasado, este lunes a más tardar debería ser enviado al Congreso, junto con el decreto que oficializa el llamado a extraordinarias.

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