El Gobierno dispuso hoy un cambio en la composición y las tareas realizadas por Casa de Moneda, que presentó como “reconformación estructural y operativa”, que podría derivar no solo en su reducción sino en su “eventual liquidación”.

Además, resolvió convertir a la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac) en el Registro Nacional de Armas (Renar), que fuera disuelto en 2015.

Las medidas forman parte del paquete de facultades delegadas, cuando falta una semana para que venza el plazo autorizado al Poder Ejecutivo por el Congreso, y quedaron plasmadas respectivamente en los decretos 442/2025 y 445/2025, ambos publicados hoy en el Boletín Oficial.

 

Diferentes actividades de la Casa de Moneda se transferirán a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), el Registro Nacional de las Personas (Renaper) y la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (Arsat) y, si fuera necesario, también se transferirán a esos organismos el personal especializado correspondiente.

Asimismo, los inmuebles que pudieran quedar en desuso serán transferidos a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).

En el caso de la Anmac, además de su transformación en el Renar, dejará de ser un organismo descentralizado para actuar en el área del Ministerio de Seguridad Nacional.

Liberarse de “un lastre”

 

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, consideró que la “reconformación” de Casa de Moneda es “un paso para su reducción y eventual liquidación” y que permitirá desprenderse de “un lastre que acarreamos hace años”, en alusión a los varios ejemplos de ineficacia, escaso nivel de operabilidad y duplicidad de funciones detalladas en los considerandos del decreto.

“Casa de la Moneda hace tiempo perdió su esencialidad (la impresión de billetes es un mercado ultra competitivo en el mundo) y ha sido un lugar de escándalos y corrupción sucesivos”, señaló el funcionario en un posteo en la red social X,. entre los que destacó “la tendencia del kirchnerismo de no aumentar la denominación de los billetes”.

Al respecto, aseguró que “en la segunda Presidencia Cristina Fernández de Kirchner, no emitir billetes mayores a 100 pesos implicó un costo extra de emisión de unos 600 millones de dólares. Luego, el inefable Alberto Fernández repitió el truco. Así estábamos”, sentenció.

 

Las funciones transferidas

 

Luego de enumerar la duplicidad de funciones y los gastos que representó su mantenimiento en transferencias del Tesoro, el Gobierno consideró procedente la reconversión de Casa de Moneda “a fin de simplificar la estructura del Estado Nacional”.

De esa forma, se instrumentará las transferencia de actividades, personal especializado y bienes muebles a ARCA en el caso de los “instrumentos fiscales de control y servicio de trazabilidad”, al Renaper para producción de pasaportes y la personalización del correspondiente chip electrónico y a Arsat en lo referente al área de "Billetera Virtual”.

Pese a la posibilidad de una disolución del organismo lanzada por Sturzenegger, en los considerados el Gobierno asegura espera que la reconformación de Casa de Moneda “redunde en una disminución de costos operativos, permita reorientar los recursos disponibles y contribuya a concentrar los esfuerzos en sostener y reactivar aquellas actividades que aún presentan potencial”.

En ese sentido, precisó que las transferencias de funciones implicará “una disminución del 19,62% en gastos de personal”, a los que deben agregarse “los costos indirectos y los servicios conexos, tales como mantenimiento de maquinaria, comedor, seguridad, limpieza, etc”.

 

ANMAC

 

El Anmac es actualmente un organismo descentralizado y, con su transformación en el Renar, pasará a ser un ente desconcentrado del Ministerio de Seguridad Nacional, “sin que ello resienta el cumplimiento de las funciones esenciales que le fueran asignadas”, indicó el Gobierno.

Con ese cambio, también se procederá a la disolución del Fondo de Promoción de las Políticas de Prevención de la Violencia Armada (FPVA), “en tanto el financiamiento de las políticas públicas orientadas a la prevención de la violencia armada será afrontado por los recursos asignados al Ministerio”, aclaró.

“La centralización de la Agencia Nacional de Materiales Controlados redundará en una reducción del gasto público, atento que las tareas de apoyo necesarias para su funcionamiento como organismo desconcentrado serán cumplimentadas por el Ministerio”, completó el Gobierno en los considerandos del decreto.

Para Sturzenegger, “los organismos descentralizados son caros porque requieren una estructura administrativa propia y porque generan incentivos a la proliferación de trámites pagos”.

“Por ello, la transformación de la Anmac en un desconcentrado sigue, como ya hemos hecho en muchos otros organismos, bajando el costo del Estado, en este caso sin afectar sus funciones sustantivas”, concluyó.