El desplome del precio de la soja le costará al país USD1.300 millones
La cotización de los futuros de soja perforó los USD500 por tonelada, lo que obliga a recalcular el potencial exportador argentino para 2023 y despierta dudas sobre 2024
La caída del precio internacional de la soja por debajo de los USD500 la tonelada obligó a recalibrar las proyecciones del potencial exportador argentino. Respecto de las estimaciones de marzo, ahora se la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) calcula que el país, además de los USD6.700 millones que el principal complejo agroexportador perdió por la sequía, ahora adicionará pérdidas por USD1.301 millones por el deterioro de los términos de intercambio para la soja y sus derivados. Es que por primera vez en cuatro años EEUU tendrá un volumen de producción que le permitirá el autoabastecimiento y además lo dejará con un saldo exportable que competirá en el mercado internacional con la producción sojera argentina.
Ya los buenos rindes de la cosecha en Brasil le habían puesto un techo al precio de la soja, lo que hacía imposible pensar en que la caída en los volúmenes cosechados iba a poder compensarse con un mejor precio internacional. Ahora las excelentes proyecciones del Departamento de Agricultura de los EEUU para la cosecha en su país le quitaron el piso. El futuro de soja para fin de mes perdió el 17 de mayo el sostén de USD500 por tonelada en el mercado de Chicago y siguió en baja hasta los UD486 este martes, son precios que no se veían desde 2021. Esto coincide con las subas de tasas en los países centrales, lo que desalienta la inversión en futuros de commodities y también deprimen su precio internacional.
"Esta caída no podría registrarse en un peor momento para nuestro país, que producto de la feroz sequía, heladas a destiempo y olas de calor sofocantes en la primavera-verano ha visto la productividad de la soja caer a su peor marca desde 1996, con una previsión de cosecha de apenas 21,5 Mt para el ciclo 2022/23", consideraron Guido D’Angelo y Emilce Terré., autores del último reporte de la BCR en el que calificaron a esta nueva pérdida de divisas como una "dura estocada".
Así, la BCR corrigió sus estimaciones de marzo y recalculó que el país podrá cobrar USD375 millones menos por sus exportaciones de aceite de soja respecto de lo que sucedió el año pasado, USD 762 millones menos por las de harina de soja y USD164 millones menos por los porotos.
"Entre marzo y la actualidad, la valuación del volumen proyectado de exportaciones del complejo soja para la campaña en curso (2,5 Mt de poroto, 19 Mt de harina y 3,4 Mt de aceite) ha perdido 1.300 millones de dólares adicionales. Como resultado, a los valores actuales, la liquidación de divisas del principal complejo exportador de la economía argentina evidenciaría una pérdida interanual de US$ 8.000 millones el año en el ciclo 2022/23, respecto de la anterior campaña 2021/2022", detallóla BCR.
Precisamente porque entre las causas de esta caída en la cotización de la soja se encuentran fenómenos que no apuntan a corregirse en el corto plazo como las altas tasas de interés, la acumulación de stocks granarios en los Estados Unidos y la caída en el consumo mundial, estos nuevos precios pueden impactar no solo en las estimaciones de los ingresos de divisas para la Argentina en 2023 sino también para el año que viene.