El secreto vital de Giorgio Armani: trabajo, disciplina y estilo hasta el final
El diseñador murió a los 91 años tras mantenerse activo hasta el final. “El trabajo es la mejor medicina”, repetía, fiel a su rutina saludable y a su estilo
Giorgio Armani murió a los 91 años en Italia, dejando atrás una de las carreras más influyentes de la moda contemporánea. La empresa que fundó en 1975 confirmó que el diseñador “trabajó hasta sus últimos días, dedicándose a la compañía, a las colecciones y a los muchos proyectos en marcha y futuros”.
Nacido en Piacenza el 11 de julio de 1934, Armani abandonó la carrera de Medicina en los años 50 para incorporarse al ejército. Tras esa etapa, inició su camino en el comercio y en la moda, hasta que en 1975 fundó, junto a Sergio Galeotti, la firma que transformaría su nombre en sinónimo de elegancia.
Una rutina de vida saludableArmani atribuía su longevidad a tres pilares: una dieta equilibrada, ejercicio regular y, sobre todo, el trabajo. “El trabajo es la mejor medicina”, declaró al Wall Street Journal en 2024, cuando ya atravesaba los 90 años. Ese mismo verano, tras algunos problemas de salud que lo mantuvieron en reposo, aseguró que al volver a trabajar se sintió mejor.
En una de sus últimas entrevistas, al Financial Times, confesó que su mayor debilidad era no poder delegar. Incluso durante los meses en los que no pudo asistir a desfiles en Milán por una internación, supervisó remotamente pruebas de vestuario y maquillaje. “Todo lo que van a ver se hizo bajo mi dirección y cuenta con mi aprobación”, subrayó entonces.
Una fortuna y un legadoForbes estimó su patrimonio en USD 12.100 millones al momento de su muerte, basado en su participación del 99,9% en la compañía, que en 2024 generó ingresos por 2.400 millones de USD.
La empresa comunicó que “empleados y familia” continuarán con el proyecto y “protegerán lo que él construyó”. Armani había hablado de una sucesión “orgánica”, con una transición gradual de responsabilidades hacia su círculo cercano. Entre los nombres mencionados estaban Leo Dell’Orco, jefe de diseño masculino, y su sobrina Roberta Armani.
Del cine a la moda globalArmani saltó al reconocimiento mundial en 1980, cuando vistió a Richard Gere en American Gigolo. Desde entonces, su casa de moda diseñó vestuario para películas como Los Intocables (1987), Buenos Muchachos (1990) y The Dark Knight (2008). Con el tiempo, diversificó su marca hacia perfumes, cosméticos, muebles, hoteles y ropa deportiva.
La compañía informó que se abrirá una cámara ardiente el domingo para quienes deseen rendirle homenaje, aunque el funeral se realizará en privado, según la voluntad del diseñador.
Respetado por sus empleados, que lo llamaban “Il Signor Armani”, murió rodeado de sus seres queridos. Dejó un legado donde la disciplina personal, el control y la pasión por el trabajo fueron tan distintivos como sus líneas limpias y su estética sobria.