Infancias robadas, extraviadas y en vulnerabilidad extrema
La desaparición y aparición de M. nos enfrentó con la vulnerabilidad extrema en la que viven muchxs niñxs y con las infancias robadas y extraviadas.
Lo extraño es hablar de enfrentar cuando la vulnerabilidad infantil, la encontramos y nos encuentra todo el tiempo…. La encontramos cuando caminamos por la calle, cuando tomamos el subte, tomando un café en un bar con amigos, disfrutando de una noche de teatro, la sentimos como molestia cuando intentan limpiarnos el vidrio de nuestro auto, o nos detiene en la calle para pedirnos monedas. Y que hacemos con todo eso? Que exigimos? Que damos? ¿Que elegimos ver o no ver a la hora de encontrarnos con esta situación que muchas veces tiene que pegarnos cerca, muy cerca para sentir el golpe. Celebramos que apareció M. pero la infancia que transita M. es la misma infancia que según estadísticas de Unicef (2019), transita el 53 por ciento de lxs niñxs de nuestro país, expuestos a la pobreza y que según datos de último relevamiento sobre personas en situación de calle realizado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires transitan 871 niñxs que no tienen techo. Me quedo pensando en la respuesta del Estado, en las respuestas a las a familias sin techo, expuestas a la calle, despojadas, no aceptadas, que están tan naturalizadas que quedan visibilizadas… Hay mucho que responder, hay politicas públicas que faltan, políticas públicas que se necesitan para que lxs niñxs, adolescentes y familias vulneradas accedan a sus derechos. Hoy que pueden visualizarlos, que no pasen, que no queden olvidados… las infancias son una urgencia.
* Abogada de niñas, niños y adolescentes