Después de cinco días de búsqueda del Titán, el submarino que descendió más de 2500 metros bajo el agua para conocer los restos del Titanic, la nave  implosionó y confirmaron el fallecimiento de las cinco personas que estaban a bordo. El director de cine James Cameron, que dirigió Titanic y es un experto en el tema, afirmó que ambas tragedias fueron más similares de lo que parece.

El cineasta es un obsesionado por el naufragio del Titanic. Tanto, que descendió alrededor de 33 veces hacia esa zona, para poder conocer todos los detalles del desastre que ocurrió a principios del siglo pasado y lo hizo llevar a cabo su película más famosa.

"Hice Titanic porque quería bucear entre los restos del naufragio, no porque quisiera hacer la película", confesó en su momento el cineasta canadiense que terminó ganando el Oscar a Mejor Película en 1998 por el film protagonizado por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet.

"El submarino volaba como un murciélago", recordó al National Geographic sobre la primera vez que vivió esa experiencia. "Me lancé como un rayo, lo más rápido que jamás había visto. La superficie simplemente desapareció. Se esfumó. Estaba mirando el indicador de profundidad y estaba a 300 metros en los primeros minutos. Luego 600, luego 900",

El Titán, la expedición operada por la empresa Ocean Gate Expeditions, tenía el fin de descender más de 3700 metros bajo el agua para mostrarle a la tripulación a bordo los restos del Titanic. Sin embargo, no es la primera vez que el sumergible hace este tipo de expediciones: en los últimos dos años realizó 6 viajes de ida y vuelta al Titanic en 2021, y 7 más en 2022, por lo que se estimaba que el viaje iba a durar unas 8 horas en total.

Aun así, todo salió mal. Luego de su descenso al fondo del mar el domingo 18 de junio, el submarino se perdió de vista del radar y nunca más se supo algo sobre él. Las 96 horas de oxígeno que tenía no fueron suficientes y, a pesar de que esperaban "un milagro", terminó por implosionar.

“Un camino de escombros fue descubierto cerca del área de búsqueda por un robot sumergible sin tripulación, cerca del Titanic", confirmó la Guardia Costera de Estados Unidos a través de Twitter este jueves. 

Horas más tarde, en un comunicado oficial de Ocean Gate, informaron que esos escombros coincidían con la estructura del sumergible desaparecido. Lo decisivo fue que esos fragmentos incluían “la cubierta trasera del sumergible”, lo cual confirma que se trataban de los restos del ´Titán´. 

Consideran que el submarino sufrió una implosión catastrófica y los cinco tripulantes a bordo oficialmente están muertos. “Creemos que nuestro CEO Stockton Rush, Shahzada Dawood y su hijo Suleman Dawood, Hamish Harding y Paul-Henri Nargeolet, lamentablemente han muerto”, expresó Ocean Gate en el comunicado.

El tema causó una gran conmoción alrededor de todo el mundo, más específicamente a James Cameron, que realizó ese mismo viaje muchísimas veces en su vida, incluso una vez quedándose atascado en una corriente de agua por 10 horas, pero del que pudo salir con vida.

En conversación con ABC News, el cineasta no pudo evitar comparar la tragedia con el Titanic. "Me sorprende la similitud con el desastre del Titanic, en el que el capitán recibió en repetidas advertencias sobre la presencia de hielo en el trayecto de su barco y aun así navegó a toda velocidad hacia un campo de hielo en una noche sin luna, lo que provocó la muerte de muchas personas", afirmó.

 "Y con una tragedia muy similar en la que no se hizo caso a las advertencias tenga lugar en el mismo lugar exacto, de entre todas las expediciones que se han realizado en el mundo, pienso que es simplemente asombroso. Es realmente surrealista", agregó.

Cameron también confesó que se esperaba que la explicación detrás de la desaparición fuera, efectivamente, una implosión, y se puso a investigar más a fondo sobre el tema. "Un evento de onda de choque tan poderoso que en realidad eliminó un sistema secundario que tiene su propio recipiente a presión y su propia fuente de alimentación de batería, que es el transpondedor que usa el barco para rastrear dónde está el submarino", señaló. 

"Así que estaba pensando en la implosión, entonces eso fue el lunes por la mañana, volví a consultar con otras personas, localicé información que probablemente era de origen militar, aunque podría haber sido una investigación porque hay hidrófonos en todo el Atlántico y obtuve confirmación de que hubo algún tipo de ruido fuerte que era consistente con un evento de implosión”, remarcó Cameron.

“Para mí eso fue suficiente confirmación al punto de que le hice saber a todo mi círculo íntimo de personas que habíamos perdido a nuestros camaradas y los alenté a todos a levantar una copa en su honor el lunes”, concluyó.