Luego de la fuga de presos que sucedió en una comisaría de CABA, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, reiteró que “en las comisarías porteñas hay más gente detenida de la que debería haber” y le pidió al Gobierno nacional que "se lleve detenidos al Sistema Penitenciario Federal".

Además, Macri aseveró que el 94% de los detenidos son de la Justicia nacional o federal y que, por lo tanto, "no son competencia de la Ciudad de Buenos Aires".

"Muchos de ellos tienen pena firme y están condenados. Tenemos reuniones habituales con Patricia Bullrich, pero todavía no lo hemos podido resolver como deberíamos", aseguró el jefe de Gobierno porteño en declaraciones radiales.

Según datos del Ministerio de Seguridad porteño, la Ciudad cuenta con 70 comisarías (preparadas para alojar 243 personas) y 34 alcaldías (con capacidad para 798 aprehendidos). Actualmente, hay 2005 detenidos alojados en total en esas dependencias, lo que significa un 92,6% de población.

El reclamo de Macri llega luego de que este domingo por la noche se fugaran nueve detenidos del edificio anexo de la Comisaría Vecinal 1 B de la Policía de la Ciudad, ubicada en el barrio porteño de San Telmo.

Fuentes policiales informaron que rápidamente pudieron recapturar a dos de los evadidos, en tanto que los otros siete son intensamente buscados.

La Policía de la Ciudad desplegó un fuerte  operativo cerrojo que se extendió en la madrugada de este lunes y continúa, incluso, con un helicóptero de la fuerza que sobrevoló las zonas cercanas a la alcaidía durante la madrugada.

En ese sentido, Macri expresó que "una comisaría es un lugar preparado para que alguien esté detenido pocas horas" y que, cuando pasan muchos días, "provoca complicaciones" porque, por ejemplo, no hay duchas ni comida y los familiares realizan visitas.

"Todo ese operativo que tiene que ver con que alguien esté detenido, la comisaría no lo tiene, está para tener a alguien en una celda detenido unas horas y derivarlo", explicó.

Según el jefe de Gobierno porteño, esta problemática se viene arrastrando desde el gobierno anterior donde "no retiraba a los detenidos" e, incluso, informó que, al finalizar el mandato de Alberto Fernández, "había 1.850 detenidos en comisarías y alcaidías de la Ciudad", cuando tenían una capacidad menor para la cantidad de presos. 

"Hoy tenemos 2.005 detenidos y estamos peor que en diciembre por dos razones: porque seguimos teniendo un flujo de salida de detenidos que no es el suficiente y porque estamos mucho más activos en la calle, pero necesitamos que esos detenidos se vayan, porque no son de la Ciudad", afirmó.