El oficialismo y el radicalismo del Senado están optimistas en que van a conseguir dictaminar el proyecto de ley que reforma el Sistema de Jubilaciones y Pensiones la semana que viene, para aprobar la propuesta que idearon con el Ejecutivo. De esta manera, evitarían que se sancione lo que aprobó Diputados en junio, que cuenta con el veto garantizado del presidente Javier Milei.

Así se lo precisaron a BAE Negocios, después del plenario de comisiones que reactivaron este miércoles, entre Presupuesto y Previsión Social, presididas por Ezequiel Atauche (LLA) y Carmen Álvarez Rivera (PRO). Los funcionarios Carlos Guberman, Secretario de Hacienda; Mariano De Los Heros, titular de ANSES; el asesor Alejandro Chiti y el Secretario de Trabajo, Julio Cordero, estuvieron presentes en el debate para defender la nueva propuesta.

Se trata de un proyecto que busca reemplazar la fórmula jubilatoria que fijó Milei en marzo a través del decreto 274, que contempló una compensación del 12,5% en abril y un aumento por inflación desde julio. El proyecto que aprobaron los diputados, por iniciativa de la UCR y UxP, sumó un 8,1% que compensaría el pico de inflación que hubo en enero -del 20,6%-. No se tomó en cuenta lo perdido por la inflación de diciembre de 2023, que fue del 25,5%.

La oposición además aprobó, con 162 votos afirmativos -casi 2/3 de mayoría-, que haya una fórmula que integre los salarios, además de la inflación, a través de una variación anual por RIPTE, la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables, que sería del 50% por sobre el IPC del último año. Con todo, agregó un artículo que fije que los haberes mínimos nunca queden por debajo del 1,09% de la Canasta Básica Total del adulto y otro que obliga al Ejecutivo a cancelar las deudas previsionales con las 13 cajas provinciales.

El empalme del 8,1% sería lo único que el Gobierno estaría dispuesto a mantener, según anunciaron los funcionarios ayer, mientras que los otros tres artículos serían descartados del proyecto. El jefe de bloque de la UCR, Eduardo Vischi, busca que su bloque se una a esta alternativa, distanciándose de lo que ideó su partido en la Cámara baja. Esto es condicionante, ya que si Diputados logra insistir con 2/3 en el proyecto original, esos tres artículos serían vetados por Milei de todos modos y necesitarían 2/3 también en el Senado para lograr sancionar el proyecto.

La decisión se toma en torno al impacto fiscal que tendría la aprobación de este proyecto, en medio de los intentos de conquistar el sagrado superávit. Según el informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso, el proyecto que aprobó la Cámara baja tendría un costo adicional del 0,4% del PBI este año. A eso se le suma el aumento que implicaría la variación por RIPTE -que es impredecible- y los aumentos de los haberes mínimos. "Es imposible que el sistema sea sustentable en el tiempo", argumentaron los funcionarios.

Sobre las cajas provinciales, el reclamo pisó fuerte de parte de José Mayans, jefe de la bancada kirchnerista, que enfrentó a los funcionarios por el decreto que promulgó Milei en marzo, que suspendió los giros de la Anses a las provincias que mantenían deudas previsionales. "Lo que pide este artículo es que el Estado no tenga superávit", sintetizó Guberman. Los senadores de UxP buscan que se apruebe el proyecto tal cual vino de Diputados y pretenden ir al recinto el jueves que viene.

El tema se puso sobre la mesa entre los gobernadores de Juntos por el Cambio que asistieron hoy a la Casa Rosada, en la previa del acto de Mauricio Macri en La Boca, para reunirse con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Entre las provincias que fueron implicadas en la medida se encuentran Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Tierra del Fuego y Chaco; y las deudas certificadas equivalen a un 0,13% del PBI, según el informe de la OPC.

Debido a una moción que votaron en una sesión especial a principios de julio, el proyecto no se tratará sobre tablas -sin dictamen-. Para eso necesitaban los 2/3 de los votos. Sin embargo, la presión de los opositores para que no se siga postergando el tratamiento apura las negociaciones. "La idea es dictaminar la semana que viene", dijeron del radicalismo.

Sin embargo, las iniciativas abundan desde otros sectores y todavía no fueron discutidas. Por su parte, el senador Martín Lousteau, quien se ausentó en la reunión de este miércoles, tiene su propio proyecto que contempla una salvaguarda en caso de que haya deflación, para que así el IPC no represente un techo para los jubilados.

También hay otra iniciativa por parte de los dialoguistas Edgardo Kueider y de Edith Terenzi, que igualmente tienen sus firmas aseguradas. Promueven una recomposición de emergencia o una actualización por inflación diaria sobre la base del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER).