El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, ha publicado un 'Llamamiento a la acción sobre el calor extremo' en respuesta a los efectos mortales del aumento de las temperaturas en todo el mundo, en el que pide proteger a los trabajadores, así como a los más vulnerables.

Además, subraya la necesidad global de impulsar la resiliencia utilizando datos y ciencia, y limitar el aumento de la temperatura media global a 1,5 °C.

La crisis climática está elevando las temperaturas a niveles "insoportables en todo el mundo", recuerdan, provocando muertes y enfermedades relacionadas con el calor y poniendo a prueba los sistemas sanitarios de todo el mundo. El estrés por calor es la principal causa de muerte relacionada con el clima y las estimaciones muestran que se produjeron aproximadamente 489.000 muertes relacionadas con el calor cada año entre el año 2000 y 2019.

"El calor extremo empeora mucho la salud de las personas que ya padecen enfermedades, y afecta a la salud de todo el mundo de maneras a veces sorprendentes. Incluso la salud mental se ve afectada por el calor, haciendo que las personas se sientan confusas, ansiosas o incluso violentas", dijo la directora del Departamento de Medio Ambiente, Cambio Climático y Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), María Neira.

La exposición aguda y prolongada a un exceso de calor provoca estrés térmico en el organismo y agrava enfermedades subyacentes como las cardiovasculares, la diabetes, la salud mental, el asma y las enfermedades renales. Puede aumentar el riesgo de accidentes, los resultados adversos del embarazo y el parto, y potenciar la transmisión de enfermedades infecciosas. "La buena noticia es que las enfermedades y muertes relacionadas con el calor se pueden prevenir", recalcan desde la ONU.