La decepción y el enojo del turismo internacional es tapa en los diarios de Francia. Los trabajadores de la Torre Eiffel hicieron un paro por la falta de presupuesto y la mayor atracción de París está cerrada por segundo día consecutivo. 

La empresa encargada de administrar el monumento es la Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (SETE), a través de un contrato de delegación de servicio público con el Ayuntamiento de París desde noviembre de 2017 hasta 2032. Es la segunda medida de fuerza que hacen en los últimos dos meses por el mismo motivo.

Por qué cerró la Torre Eiffel

"Debido a una huelga, la Torre Eiffel está cerrada. Pedimos disculpas", es la frase que reza un gran cartel colgado sobre el monumento. El mismo que también aparece en el sitio web de SETE, que cuenta con 340 empleados y reciben 6 millones de visitantes anuales.

Los dos sindicatos que nuclean al personal son la CGT y la Fuerza Obrera (FO) se organizaron para reclamar aumentos salariales y mayores fondos para el mantenimiento del histórico monumento parisino.

Uno de los trabajadores adheridos a la CGT Denis Vavassori, explicó al medio español El Mundo que las visitas diarias a la Torre Eiffel oscilan entre 16.000 y 18.000 personas y esto "da una idea de la pérdida que supone" abrir por uno o más días. Además, aseguró que, "si no se equilibran los gastos e ingresos, corren el riesgo de que el monumento "entre en déficit".

Según denunciaron los trabajadores, el presupuesto no alcanza para realizar los trabajos necesarios de mantenimiento de la torre, "mientras que el Ayuntamiento les exige más dinero por la explotación de la misma". 

Los sindicatos denunciaron que la administración actual "está llevando a la empresa que gestiona el monumento directamente a las peores dificultades" e impone un modelo "insostenible" para la gran estructura de hierro que fue inaugurado en 1889.

Durante 2023, la torre generó USD 129 millones de ingresos, a pesar del incremento de los costos de mantenimiento. La pintura del monumento se debe renovar cada siete años y durante la última campaña el presupuesto permitió cubrir solo una parte de estos trabajos, llegando a pintarse solo el exterior para los próximos Juegos Olímpicos que se celebrarán en la ciudad en julio de este año.

De no obtener respuestas, los trabajadores amenazaron con declararse en huelga durante este período, que se prevé será de gran flujo turístico, como suele suceder durante las Olimpíadas.