Con relación al derrumbe en una obra en construcción de la calle Freire 2200 entre Mendoza y Olazábal en el barrio de Belgrano la UOCRA (Unión Obrera de la Construcción Argentina) informó que el año pasado realizó denuncias sobre las falencias de ese emprendimiento, sin que las autoridades del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires tomaran alguna medida al respecto. En efecto, a mediados de 2019 la organización que lidera Gerardo Martínez, realizó dos presentaciones ante la Inspección de Seguridad e Higiene de la Ciudad de Buenos Aires denunciando el incumplimiento en forma generalizada de las normativas de protección y limpieza de la obra. "Las cuales se reflejaron en la presentación con todos los detalles, para lamentar es que no se tomó en cuenta esa denuncia", señalaron desde la  UOCRA. Incluso el 5 y 19 de diciembre del año pasado, se exigió una respuesta frente a la falta de vías de circulación apropiadas, iluminación y mantenimiento de los trabajos. Según informaron desde el sindicato de la Construcción a BAE Negocios también se le reclamó a la empresa Zedil S.A. por no cumplir con la entrega de ropa de trabajo adecuada, protecciones oculares, respiratorias y guantes. El requerimiento incluyó que no se aplicaban las medidas necesarias para proteger las aberturas de pisos con cubiertas o barandas.  Con la verificación técnica respectiva y en pos del "trabajo seguro" que busca garantizar la organización sindical para todo emprendimiento donde haya trabajadores de ese gremio, dejaron constancia en las denuncias que tampoco se respetaba el tendido de cables aéreos y que faltaban llaves térmicas, disyuntor y descarga a tierra.