La aceleración inflacionaria dejó de ser una prolongada y amarga promesa y se convirtió en realidad durante octubre. Las consultoras privadas la estiman con un piso de 3% y un techo de 3,3%. La clave del nuevo ritmo es la mayor suba del precio del dólar oficial que convalidó el BCRA, en el marco de su nueva estrategia. Pero, además, los paralelos generaron mayores incrementos, vía expectativas, en las primeras tres semanas del mes. En la cuarta, aflojaron junto con la brecha cambiaria y eso podría implicar que las nuevas aceleraciones que se esperan para noviembre y diciembre no alcancen niveles desbocados.

Es unánime, entre consultoras, que hubo aceleración en octubre, tras los 2,7% y 2,8% que midió el Indec en agosto y septiembre: el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) la estimó entre 2,9% y 3,1%; Seido en 3%; Orlando Ferreres y Asociados en 3,1%; Ecolatina en 3,2%; y Cerx en 3,3%.

Además de la dinámica del dólar, algunos aumentos de regulados y la apertura de la cuarentena volvieron a ser claves. Y la suba de los alimentos y bebidas vino picante, lo que le sigue dando un carácter regresivo y preocupante a la dinámica de precios, que impactará en las canastas básicas.

El director del CEPA, Hernán Letcher, dio un panorama: "Estimamos entre 2,9% y 3,1%. Básicamente vinculado a que tuvimos aumentos de Precios Máximos de hasta 6% a principios de mes, aunque la fruta y la verdura no tuvieron un incremento significativo salvo en papa y tomate; los medicamentos incrementaron 5,5% en el mes; el tipo de cambio oficial tuvo un incremento de 3,15% y los intensos movimientos del Contado Con Liquidación (CCL) y el blue dieron marco a niveles de dispersión elevados de distintos productos; además hubo un ajuste de naftas por el impuesto, de 3,5%, a mediados de mes; comunicación y servicios mantuvieron el congelamiento".  Si bien algunas consultoras midieron a los alimentos y bebidas por encima de la inflación general y otras por debajo, todas marcaron subas importantes para el rubro. Ecolatina la observó en 2,8%; el CEPA vio una suba de hasta 5%; Cerx una de 2,9%; Orlando Ferreres y Asociados una de 4%.  El economista jefe de Ecolatina, Matías Rajnerman, dio su lectura: "La inflación nos dio 3,2% en el mes y alimentos y bebidas 2,8%. La inflación núcleo 3,2%, también. Hubo dos factores: una cuarentena que se relaja, aunque menos rubros sumándose que en otros meses. También estuvo el tema de la brecha, que impactó en rubros como electrodomésticos, electrónicos, equipamiento y mantenimiento del hogar. Se siguen importando al dólar oficial pero vía expectativas y mostraron algunas subas importantes, aun sin tanto fundamento. Alimentos siguió por debajo del nivel general. Pero es una suba importante y muy por encima de los meses anteriores. Pensando en el componente regresivo de la inflación, es algo que preocupa". El dólar oficial es el que lidera entre los fundamentos de las subas, aunque el paralelo influyo. Desde Seido afirmaron: "Los precios están siguiendo al dólar oficial, más allá de los controles de precios, las regulaciones y las condiciones de la economía. El abandono del crawling peg se tradujo a una mayor depreciación del tipo de cambio oficial (3,2% en octubre contra 2,6% en septiembre) y la inflación aceleró tanto para los productos dolarizados como para los no dolarizados".  

 

La calma del dólar evitará que se desboque

 

Desde Cerx proyectaban, en la previa, una aceleración a una inflación de 3,9% en noviembre. Su último informe semanal señaló: "Tras la aceleración en las primeas semanas de octubre, los precios atenuaron la suba durante la última semana, favorecida por la caída del dólar informal. Aunque el gobierno prometió un desarme gradual de Precios Máximos, es de esperar que, en la medida en que las expectativas se estabilicen, las subas de precios se normalicen". Ante la pregunta de BAE Negocios, la directora de la consultora, Victoria Giarrizo, señaló que seguirá habiendo aceleración inflacionaria aunque tal vez menos de la esperada en la previa: "Cuando el blue se empezó a disparar y comenzaron a escasear productos y arrancaron las remarcaciones, se esperaba una aceleración importante. Con la caida del blue, empieza  a pasar que, si bien van a seguir ajustando, lo van a hacer dentro de la dinámica que veníamos viendo. Nosotros proyectábamos 3,9% para noviembre pero posiblemente sea menor la aceleración, si se mantienen las condiciones actuales y el blue estable". Desde Seido proyectaron: "Nosotros esperamos que la inflación mensual acelere algo en noviembre, hasta 3,2% o 3,5%. Estará explicado por un mayor arrastre estadístico y el impacto de algunos precios regulados. Prevemos un riesgo con sesgo al alza, ya que el BCRA podría convalidar una mayor depreciación del dólar oficial para contener las tensiones del mercado de cambios".