Rumores sobre una reunión de emergencia de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos empezaron a correr mientras el miedo se apodera del mercado en un verdadero Lunes Negro. Las bolsas globales se desploman, y el petróleo y otros activos de riesgo sufren una fuerte corrección. 

Analistas sostienen que la Fed podría convocar una reunión de emergencia la próxima semana para anunciar una rebaja de tipos de hasta 50 puntos básicos. Esto debido a los temores de que la demora del banco central estadounidense en flexibilizar su política monetaria estaría la economía hacia una recesión.

La presión del mercado avivada por el Lunes Negro, fogonea la posibilidad de una reunión de emergencia para rebajar las tasas.

 

Más recortes

Si la Fed mantiene el calendario oficial anunciado la semana pasada, la primera rebaja de tipos debería tomar forma el 18 de septiembre. Sin embargo, los mercados ya descuentan entre cuatro y cinco recortes de 25 puntos básicos este año, considerando una rebaja de 50 puntos básicos en septiembre o en el caso de que se concrete la presunta reunión de emergencia.

Las reuniones de emergencia de la Fed tienen carácter excepcional. La última fue en marzo de 2020, cuando se bajaron los tipos de interés al 0% en respuesta al impacto que estaba teniendo la pandemia en la economía. En ese momento, la inflación estaba por debajo de la meta, y la presión del coronavirus llevó a la Fed a recortar las tasas en 100 puntos básicos.

 

Petróleo

Hoy, aunque el IPC en EE.UU. sigue elevado, el pánico en los mercados y la desaceleración de indicadores clave, como el mercado laboral, podrían forzar a la Fed a actuar. Por el momento, todo son rumores.

Las bolsas están cayendo con gran intensidad en Europa, mientras que en Asia el Nikkei japonés se derrumbó un 12,4%. Por su parte, el bitcoin corrige más de un 11% y el petróleo retrocede un 2% a niveles mínimos del año. Esta baja del petróleo (uno de los principales causantes de los movimientos inflacionarios) podría ser un aliado inesperado de la Fed, abriendo la puerta a un recorte de tasas más agresivo de lo esperado.