Abril arrancó con la dolarización de las tarifas de gas, lo cual supone un aumento del 600%, además de incrementos de hasta 185% en los servicios de luz y 209% en agua. Montos que presionan una inflación que, según analistas, se ubicaría en torno al 13%. 

Frente a los fuertes aumentos, Patricia Bullrich dijo que "no es caro pagar 50 dólares los servicios", lo cual representa alrededor de $50.000 a precio dólar blue hoy o MEP. La ministra de Seguridad comparó los precios argentinos con los uruguayos y, según dijo, allí cuesta "cinco o seis veces más". "El problema es que durante años y años se mintió", aseguró.

A partir del 1° de abril se sumaron nuevos aumentos no solo en las tarifas, sino también en combustibles, peajes y colegios. Todos incrementos que complican la idea del Gobierno de estabilizar la inflación.

A pesar de todo ello, Bullrich aseguró que "no va a haber marcha atrás en las medidas" porque "hay una decisión muy clara del Presidente de seguir en la línea de bajar el déficit". En diálogo con el canal de cable Todo Noticias (TN), la funcionaria trató de enviar un mensaje de tranquilidad y aprovechó para defender la gestión de Javier Milei.

"Como en la cinchada, si uno larga la cuerda, la gente se va a caer y eso no va a pasar", dijo, en referencia al juego de la soga en la que dos equipos tiran en sentido contrario de una cuerda hasta que uno de los grupos lleva al otro hacia su zona.

"El pueblo eligió una opción de shock", aseguró Bullrich, al tiempo en el que analizó que "la gente ve el problema y también ve la solución, por eso apoya". Según ella, "la gente está viendo resultados todos los días".

El plan "motosierra" de Javier Milei avanza y ya son 15.000 los despidos de empleados estatales, una cifra que prometió en campaña. Además, se cerraron alrededor de 60 oficinas de la Anses en marzo y provocó el despido de 1.300 trabajadores. Además, de cesantías de trabajadores en la Secretaría de Trabajo, el Conicet, el Ministerio de Economía, el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), entre otras dependencias del Estado.

Frente a esta situación, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) protestaron en una inusual imagen de unidad. Este miércoles, ATE resolvió ocupar pacíficamente edificios estatales como estrategia de reclamo.

El resultado fue el despliegue de un fuerte operativo de seguridad: efectivos ingresaron a las dependencias del Estado con escudos y armas de fuego. La ministra dijo que "no se tomó ningún Ministerio" y que desde el Gobierno tienen "una fuerza preparada que tiene como objetivo el cuidado y el orden del Estado". "No nos van a cansar por más que salgan todos los días", dijo.

Para ella, "los despidos del sector público fueron con criterio" y aclaró que "nadie quiere despedir gente porque sí, pero si el Estado se convierte en un peso muerto, en algún momento hay que tomar la decisión". Además, adelantó que "las provincias tendrán que hacerlo también". 

"No nos van a torcer el brazo, hagan lo que hagan", aseguró, al tiempo en el que agregó: "La convicción generó en la Argentina una nueva gobernabilidad, que la da la decisión de no abandonar un camino. Ya no es una toma y daca para conseguir apoyos para una ley o si uno logra que no haya un paro".

ATE resolvió realizar un paro nacional para este viernes 5 de abril. En el medio de la protesta frente a los Ministerios y Secretarías, el secretario general del gremio, Rodolfo Aguiar, aseguró: "Le vamos a dar pelea y le vamos a sacar la motosierra". En paralelo, la CGT está en una disyuntiva: ¿paro general o movilización?