Trump y Putin negociarán una tregua en Ucrania
Los mandatarios tendrán una cumbre en Budapest para avanzar en una solución al conflicto que ya lleva tres años y medio
En su edición de ayer, BAE anticipaba que el próximo desafío del presidente estadounidense Donald Trump, tras cerrar una tregua entre Israel y Hamás en Gaza, sería avanzar en un acuerdo de paz en la guerra de Ucrania.
Bueno, horas después, se anunció que Trump, y su par ruso, Vladímir Putin, acordaron reunirse en Budapest para intentar destrabar el conflicto en Ucrania. El anuncio se conoció tras una conversación telefónica de más de dos horas, que ambos mandatarios calificaron de "muy productiva" y que, según fuentes de Washington y Moscú, marcó el primer paso hacia una posible negociación directa desde el inicio de la ofensiva rusa en 2022.
Trump comunicó la decisión a través de Truth Social, donde destacó que Putin lo felicitó por "el logro histórico de la paz en Oriente Medio" y expresó su disposición a explorar una salida diplomática a la guerra en Europa del Este. "El presidente Putin y yo nos reuniremos en Budapest para ver si podemos poner fin a esta guerra ignominiosa", escribió el mandatario estadounidense.
Situación difícil
La Casa Blanca confirmó que, antes del encuentro, los asesores de alto nivel de ambos países se reunirán para delinear la agenda. El secretario de Estado, Marco Rubio, encabezará la delegación estadounidense, mientras que su contraparte rusa, Serguéi Lavrov, participará por Moscú. Los equipos diplomáticos iniciarán los contactos formales la próxima semana.
En paralelo, el asesor presidencial ruso Yuri Ushakov aseguró que los preparativos avanzan "sin demora" y que la reunión podría concretarse antes de fin de mes. "Ambos líderes consideran que el momento es crucial para abrir un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales", señaló.
El contexto en el terreno ucraniano agrega urgencia a la iniciativa. Después de un verano boreal marcado por la fallida contraofensiva de Kiev en el frente sur, las fuerzas rusas avanzan en las regiones de Zaporiyia y Donetsk, mientras intensifican los ataques con misiles sobre infraestructuras energéticas. Los propios generales ucranianos reconocen que la situación en el frente "sigue siendo difícil".
Equilibrio
En Washington, la convocatoria a la cumbre generó reacciones divididas. Algunos legisladores republicanos la celebraron como "una oportunidad para terminar con una guerra costosa", mientras que sectores demócratas advirtieron sobre los riesgos de concesiones unilaterales a Moscú.
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, confirmó que Budapest ya inició los preparativos logísticos y calificó el encuentro como "una gran noticia para los pueblos del mundo amantes de la paz". Según trascendió, el gobierno húngaro ofrecerá garantías de seguridad y confidencialidad para la cumbre.
A medida que se acerca la reunión, los analistas anticipan que el encuentro entre Trump y Putin podría redefinir el equilibrio diplomático global. Aunque las perspectivas de un alto el fuego inmediato son inciertas, el solo hecho de retomar el diálogo directo entre Washington y Moscú representa un cambio de escenario en la guerra más prolongada que enfrenta Europa desde la Segunda Guerra Mundial.