Como sucede siempre en los últimos meses del año, los medios de los EE.UU. tienen ya en mente cuáles serán las películas nominadas al Oscar. Por lo general fallan poco (o nada) en la lista final. Variety acaba de publicar la que -con toda probabilidad, aunque quizás haya algún cambio- sea matriz de las nominaciones definitivas. Lo más interesante es que hay una combinación más equilibrada entre filmes "independientes" y grandes espectáculos, e incluso mayor participación de lo "internacional". La primera advertencia: no hay grandes favoritas (como Oppenheimer en 2023, por ejemplo) y tampoco filmes de animación (algo que ya era casi costumbre) en las diez mencionadas a Mejor Película.

Los grandes espectáculos son Gladiador II (previsible, aunque parte "de abajo", a diferencia de su multipremiada predecesora de 1999), Duna: segunda parte (que tuvo gran taquilla, y es la culminación de una obra en dos mitades, un poco como el récord El Señor de los Anillos: El retorno del rey); y la gran esperanza Wicked, que se convirtió rápidamente (marketing mediante) en un fenómeno en su país de origen. Todos filmes por encima de los 200 millones de dólares de presupuesto.

En el escalón económico más bajo, aparecen la gran ganadora de festivales Anora, de Sean Baker (interesante: el primer premio que obtuvo el director fue en Mar del Plata, con Tangerine); el drama optimista carcelario sobre presos creativos Sing Sing; y la muy "lobbyada" La habitación de al lado, de Pedro Almodóvar (número puesto para nominado a Mejor dirección). Y hay una biografía "de rigor", Un completo desconocido, sobre el principio de la carrera de Bob Dylan (interpretado por Thimothée Chalamet, seguro nominado).

Luego, Emilia Pérez, la presencia de Netflix, película hablada en castellano, dirigida por un francés (Jacques Audiard, el de Un profeta), sobre un narco que cambia de sexo y con canciones y números musicales, que tiene bastante consenso y puede tener nominaciones para Zoe Saldaña, Audiard y Karla Sofía Gascón. Aquí, como en el caso de Almodóvar, suma lo global-internacional. Y quedan The Brutalist, una saga de más de tres horas sobre un arquitecto (suma Adrien Brody como actor, casi seguro) y Cónclave, película de suspenso ambientada en el Vaticano que anda muy bien de taquilla con pequeño presupuesto e interpreta Ralph Fiennes (pero se rumorea nominación cono actriz de reparto para Isabella Rossellini).

¿Qué queda afuera? Por ahora, los dos grandes éxitos de taquilla del año (Intensa Mente 2 y Deadpool & Wolverine), que igual tendrán menciones en algunas categorías (Intensa... es casi segura ganadora del Oscar de animación, sumando otra estatuilla para Pixar). Pero el conjunto posible muestra una panoplia amplia en cuanto a orígenes, géneros y presupuestos, aunque sin demasiada innovación. Se nota un reflejo de Cannes (Emilia Pérez, Anora...) y de Venecia (The Brutalist, La habitación...), combinado con presupuesto alto (sí y sólo sí se trata de películas "serias" o dramas). En fin, ninguna novedad salvo que este año puede ganar cualquiera. Veremos si esta es la lista final y cómo funcionará el marketing.