Recomendaciones

Cuatro películas que deberían haber ganado el Oscar en Netflix

Más recordadas que las respectivas ganadoras de sus años, estas cuatro películas realmente se convirtieron en clásicos del cine contemporáneo y referencia obligada. Pero a la hora del premio mayor, no tuvieron suerte. Videos.

ldesposito
Rescatando al soldado Ryan

Hoy pocos recuerdan Shakespeare apasionado, la película que ganó el Oscar en vez de Rescatando al Soldado Ryan, por la que Steven Spielberg se llevó su segundo premio como director. Con el tiempo, Rescatando... se volvió un clásico y referencia obligada del género bélico. No solo es un filme de acción (con el tremendo desembarco en Normandía, clase magistral de relato con cámara en mano), sino que además desnudó los conflictos morales que un estado y los individuos enfrentan ante la tragedia de una guerra. De lo mejor de un director sustancial del cine contemporáneo, sin la menor duda.

Los juegos del destino

Aquí se estrenó como El lado luminoso de la vida, le dio un Oscar a Jennifer Lawrence y estuvo nominada (ganó ese año, igual con justicia, Argo). Esta comedia de David O. Russell sobre el amor entre un bipolar y una chica con trastorno de ansiedad es cualquier cosa menos un filme sobre "enfermedad de la semana". Es una historia de barrio, un cuento de familia, un discurso sobre a amistad, un poco una comedia musical, y, sobre todo, una fábula sobre la búsqueda -y la consecución- de la felicidad. Todo el elenco (Robert De Niro, Bradley Cooper, etcétera) está en estado de gracia completo.

Bastardos sin gloria

Probablemente este salvaje relato donde se corrige la historia de la Segunda Guerra Mundial sea lo mejor que hizo en una carrera notable Quentin Tarantino (aunque ese año ganó Zona de miedo, gran filme de Kathryn Bigelow). Con muchas referencias a los cuentos de hadas (sí señor), la venganza completa contra los nazis por parte de la dueña de un cine, un grupo de asesinos americanos entrenados y varias casualidades tiene además un conjunto de personajes inolvidables (Hans Landa y Aldo Raine, gloriosos).

Secreto en la montaña

Una de las mayores injusticias de los Oscar en lo que va de este siglo es el triunfo de la inane Crash (no confundir con la obra maestra del mismo título dirigida por David Cronenberg) sobre Secreto en la montaña, esa película de Ang Lee que se vendió como "la de los cowboys gay", y que es en realidad uno de los melodramas más intensos que ha dado el cine en la mejor tradición del género. Lo que hacen Jake Gyllenhaal y, muy especialmente, Heath Ledger en esta película es notable.

Esta nota habla de: