El amor después del amor es uno de los estrenos de Netflix que más está dando de qué hablar a nivel nacional. En una industria audiovisual en la que las producciones biopics abundan cada vez más y se producen en serie, la serie biográfica de Fito Páez se destaca por ser una representación genuina de la juventud de una de las mayores estrellas del rock nacional.

Elvis Presley, Elton John, Tina Turner, Whitney Houston y Freddie Mercury son algunos de los artistas internacionales cuyas historias de vida se pudieron ver en la pantalla grande estos últimos años. Además, las biopics de Amy Winehouse y Bob Dylan se encuentran en fase de desarrollo. Con esos parámetros, si hay algo que se demostró es que a la gente le interesa conocer la vida de sus ídolos, ya sea a través de películas biográficas, las redes sociales o reality shows.

Sin embargo, la gran cantidad de producciones basadas en cómo esas figuras artísticas hicieron su camino hasta ser las personas que son hoy parece haber llegado a un estancamiento: ahora todo es una biopic, y la gente pide historias nuevas; volver a la ficción y construir imaginarios que nada tengan que ver con la realidad (algo que parece haberse profundizado luego de la pandemia y esa sensación de escapismo frente al mundo real). Aún así, hay excepciones y la serie de Fito Páez parece ser una de ellas. A menos de una semana de su estreno, se ganó el amor de los argentinos.

Fito Páez es una de las figuras musicales que más representa a la cultura nacional de las últimas décadas. Oriundo de Rosario, supo hacer su camino artístico en Buenos Aires, y con 40 años de carrera, el músico no deja de sacar discos al día de hoy. El amor después del amor —que da nombre a la serie— fue su álbum de estudio más exitoso y se transformó en el más vendido de la historia del rock nacional. El año pasado el disco cumplió 30 años y abrió paso a una gira aniversario.

Si algo aprendimos, es que la vida de Páez parece salida de una ficción melodramática que se puede asemejar a las películas de Douglas Sirk: una serie de tragedias que parecen ser inexplicables en la vida del ser humano, que nos marcan como personas. Pero el arte nos salva de quedarnos en un punto sin retorno. Con estas esferas, su serie biográfica dirigida por Felipe Gómez Aparicio y Gonzalo Tobal, que lleva casi una semana en el catálogo de Netflix, ya es un éxito total.

El amor después del amor, ya disponible en Netflix

"No entiendo cómo Fito hizo para soportar tanto dolor", dicen algunos en Twitter. Y tienen razón: el músico tuvo que vivir las pérdidas de su madre, su padre, su abuela y su tía, pero eso es algo que ya sabemos todos. Es el amor justamente el motor que se pone en contraposición a la muerte en esta serie y que el protagonista utiliza como arma para poder atravesar el duelo.

El amor por sus parejas, el amor por su familia y el amor por la música son los personajes secundarios en esta historia. Entonces, El amor después del amor llega como un salvavidas entre tantas producciones biográficas en serie. El amor después del amor sí funciona como una gran biopic porque la vida de Páez parece una película, pero los hechos (trágicos o no) no dejan de ser las cosas que definen a la vida real. 

En la serie podemos ver un gran recorrido en la vida del cantante, desde su primer contacto con la música, pasando por los conflictos con su padre y ser el tecladista de Charly García en plena década de los ochenta, hasta convertirse en un músico solista en ascenso que le aseguró el lugar en la escena que ocupa el día de hoy.

Para eso, Netflix se encargó de que los actores tuvieran un parecido inigualable a los personajes de la vida real: si bien Ivos Hochman se destaca al máximo por su actuación y su parecido a Páez durante su juventud, los demás intérpretes no se quedan atrás. Micaela Riera y Daryna Butryk, que interpretan a Fabiana Cantilo y Cecilia Roth respectivamente en la serie, son muy similares físicamente a las artistas, pero no dejan de recibir aplausos por su performance en la historia. 

El elenco completado por Gaspar Offenhenden Andy Chango, Julián Kartún, Martín “Campi” Campilongo, Joaquín Baglietto y Mirella Pascual aporta a la producción una gran veracidad. No toda la vida de Fito Páez está en esta serie, pero sí todas las cosas que ocurren en la trama probablemente hayan pasado. 

Ivos Hochman y Daryna Butryk son Fito Páez y Cecilia Roth en El amor después del amor

Hay una gran nostalgia dentro de El amor después del amor. Ropa vintage, música en casettes y tiempos que parecían más fáciles que ya no van a volver. La serie le permite a los espectadores viajar a esos momentos, que se los recuerda con un dejo de nostalgia y emoción. Además, no es excluyente ser argentino para emocionarse: la historia está contada a la perfección para que alguien que no conoce a Páez pueda empatizar y entrar de lleno en ella.

A través de estas características, la serie sobre la vida del músico se robó los pobres corazones del público, demostrando que las series biopics pueden incorporar la ficción sin dejar de ser un retrato noble y honesto de las vidas de nuestros ídolos y que aún es un género dentro de la industria audiovisual que todavía vale la pena explorar.