En varios ámbitos sindicales, el ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, abordó la situación salarial de las y los trabajadores municipales de todo el país.  
No fue una mirada teórica sino que él se comprometió a avanzar con la creación de un Consejo Nacional del Salario Mínimo, una regularización contra la actual precarización laboral y de la Negociación Colectiva en el sector Municipal.
Este diario se ha referido a la cuestión en algunas publicaciones y corresponde señalar que es una iniciativa que comparto y celebro porque es el camino adecuado para conformar un instrumento que permita mejorar las condiciones de trabajo de los y las estatales municipales, quienes más sufren la precarización laboral y salarial dentro del sector público.

Según datos de fuentes gremiales, son más de medio millón los trabajadores que se desempeñan en los 2.311 municipios y comunas de todo el país, representando cerca del 20% del total de empleados públicos de la Argentina (el 60% se desempeña en administraciones provinciales y el 20% restante en la esfera nacional de acuerdo a información  extraída del Observatorio de Igualdad de Género de AmérIca Latina y el Caribe de la CEPAL.
Advierto, estando plenamente de acuerdo con la propuesta de Massa, a cuya candidatura adhiero y milito sin titubeos, que la inicitativa no está exenta de dificultades fácticas y limitaciones constitucionales que no pueden dejar de ser consideradas.
Por un lado, limitaciones de tipo constitucional, dadas por los antecedentes y acuerdos preexistentes entre las provincias para constituir la Nación, y a través de los cuales las primeras delegaron en la segunda ciertas facultades, entre las que no se encuentra la regulación del empleo público provincial y municipal, lo cual coloca un valladar al accionar nacional que solo podría ser soslayado por la vía de acuerdos voluntarios de cada una de las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Cuestiones gremiales

Otro no menor escollo a salvar, es el referido al complejo mapa de representación sindical que campea entre los trabajadores municipales, donde juegan y compiten varios sindicatos: dos uniones con alcance nacional, Asociación Trabajadores del Estado (ATE) con Rodolfo Aguiar como flamante Secretario General y la  Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) conducida por el histórico Andrés Rodríguez; y dos las Confederaciones municipales nacionales, con sus respectivas federaciones provinciales y sindicatos de primer grado en la mayoría de los Municipios, Confederación de Obreros y Empleados Municipales Argentinos  (COEMA) encabezada por Amadeo Genta y la Confederación de Trabajadores Municipales (CTM) con Rubén “Cholo” García, como Secretario  General
También se debería tener presente la reticencia de gran parte de los gobernadores e intendentes a receptar la institucionalización de la negociación colectiva, a pesar de que todos o casi todos la practican de facto.
Prueba de ello lo constituye la situación que se registra en la provincia de Buenos Aires. La ley 14.656 que regula la negociación colectiva de los municipios bonaerenses promulgada en diciembre de 2014 por el entonces gobernador Daniel Scioli, y habiendo transcurrido 9 años, solo pusieron en práctica la ley la mitad de los municipios bonaerense aproximadamente. 
Además son pocas las provincias que tienen implementada institucionalmente la negociación colectiva municipal.
Massa, de llegar a la presidencia, deberá persuadir en los primeros meses de su gestión a la mayor cantidad de intendentes y gobernadores de las virtudes y beneficios que brinda la institucionalización de las paritarias.
El compromiso de Massa con la negociación colectiva de los municipales no es nuevo, siendo Intendente municipal del partido de Tigre, fue el primer y único intendente que, a principios del 2008 adhirió a la antigua ley de negociación colectiva provincial que en su articulado permitía que los municipios podrían adherir a la misma.
Esto demuestra su conocimiento pleno de la problemática del sector y que, de resultar electo, cumplirá su palabra de intentar generar el Consejo Federal de Paritarias Municipales, ámbito que permitirá analizar y consensuar la implementación de la misma. 
En mi modesta opinión, no haría falta una ley del Congreso Nacional para crear el Consejo, sino que bastaría con un decreto generando el ámbito e invitando a adherir y participar del mismo a los gobernadores e intendentes, -por sí o por medio de quien ellos designen- y a los dirigentes del complejo espectro sindical del sector sin exclusiones.
Para limitar el número de participantes de los representantes de los gobiernos provinciales y municipales en el Consejo a constituirse, se podría explorar la posibilidad de representaciones regionales que aglutinen a varias provincias, a manera de ejemplo (Patagónicas, Andinas, NOA, NEA, Centro, CABA y Buenos Aires), pudiendo designar 2 miembros representación de cada región, uno por los gobernadores y otro por los intendentes.
Por lo expuesto y compromiso asumido, los trabajadores municipales deberían masivamente votar la formula Massa/Rossi, en defensa propia, esperemos que así ocurra, que sean electos y cuando asuman y traten esta cuestión, los actores políticos  y sociales involucrados, estén a la altura de las circunstancias y procedan con la grandeza que los tiempos demandan.

 

 (*) Abogado laboralista, ex ministro de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, conductor del Grupo Descartes