Oportunamente en: "volvió el comercio País-País" (BAE Negocios 26-05-2025), se abordó nuevamente un tema ya tratado en esta columna desde hace casi una década.

Lo que se avizoraba tiempo atrás: el "fin de ciclo" de la Globalización (1) y la evidencia empírica de la irrupción de una fase imbricada de "nacionalismos" que diseñan, ad intra sus fronteras, políticas económicas que privilegian una Inserción Internacional Inteligente (3I), es hoy una realidad inexorable.

Afortunadamente este nuevo porvenir, que ratifica: "No hay mal que dure cien años" (2), no se creó por "generación espontánea", siendo los antecedentes, imprescindibles, para concebir a la Historia como: "entrenamiento en el pasado para poder pensar y actuar en el cambio actual".

Por ello viene al caso apuntar, entre otros elementos, lo señalado, en: "Consolidación del Nuevo Orden Internacional" Parte I (BAE Negocios, 17-04-2022) y Parte II (BAE Negocios, 25-04-2022), donde se definieron como sus hechos constitutivos:

• la Revolución Energética Norteamericana (3) ,
• el acontecimiento disruptivo de la primera Administración Trump, con sus realidades conducentes,

y

• la construcción de una Alianza de Orden Uno entre los Estados Unidos (EEUU) y la Federación Rusa (FR), en torno al "vector energético".

Asimismo, y a modo de "contraparte local", podemos aseverar lo dicho en: "Un Modelo de Desarrollo Económico" Parte II (BAE Negocios 30-08-2020), donde se destacaba que:

"à la política económica tiene que direccionarse para conseguir como objetivo clave un superávit de Balanza Comercial que, en orden de magnitud, presente un piso de USD M 15.000" (a cinco años vista, de ese periodo, se puede pensar que hoy debería rondar los USD M 20.000), siendo necesarios, para garantizar la obtención de las divisas suficientes tendientes a saldar los compromisos externos asumidos y, a su vez, compensar en lo posible, el signo negativo del resto de los componentes de la Cuenta Corriente de la Balanza de Pagos (4).

Para ello, se debe procurar:

• un Tipo de Cambio Competitivo (TCC), que haga sustentable nuestra economía

y

• una "sana" Administración del Comercio Exterior (ACE), que facilite a las empresas locales la hegemonía en el mercado interno, la penetración en los externos y la generación del empleo doméstico."

Va de suyo, que ambos instrumentos constituyen el "anverso y el reverso de una misma moneda", y la cabal comprensión de esta "unidad", en su aplicación, permitirá su "impacto virtuoso".

Ahora bien: ¿será que estas recomendaciones fueron tomadas en cuenta, para desarrollar su política comercial, porà

Donald Trump?

Veamos:

• en su primer gobierno, al evitar nombrar los jueces que le correspondían a su país en la Organización Mundial de Comercio (OMC), se desactivó el Tribunal de Apelaciones de la Institución y, así, se eliminó la herramienta que tenía la economía del viejo orden para hacer imperativos sus diseños entre los países intervinientes. Sin el principio de "retaliación" para disciplinar de acuerdo con los principios del "libre comercio", la Globalización quedó herida de muerte,
• en su actual presidencia, empleó la política arancelaria para proteger las actividades económicas internas, el empleo y la inversión,

y

• las negociaciones bilaterales para fomentar las exportaciones.

Pero a posteriori, a poco de comenzar su segundo mandato presidencial, impulsa un gran "salto adelante" y se transforma en la "fuerza de ventas" de su país en el exterior.

Así, cierra una gira histórica en Medio Oriente con acuerdos comerciales billonarios, tanto en bienes como en servicios, para las empresas localmente asentadas.

Entre otros convenios, se destacan: el firmado con el Reino de Arabia Saudita, que selló el mayor acuerdo bilateral de la historia: USD M 600.000 en inversiones para el mercado estadounidense, junto con un contrato de defensa de USD M 142.000 que modernizará las fuerzas saudíes con tecnología estadounidense en seguridad marítima, aérea y sistemas de comunicación.

El signado con el Estado de Qatar, donde se aseguró una venta millonaria de aviones a Qatar Airways, generando 160.000 empleos directos y cerca de un millón indirectos.

Mientras, que su paso por los Emiratos Árabes Unidos (EAU), determinó la venta de 28 aviones comerciales (USD M 4.500), y alianzas estratégicas en la industria del petróleo, el aluminio, minerales críticos, Inteligencia Artificial y ciberseguridad,

También resulta significativo, la compra de productos primarios (que hasta ahora los importaba, entre otros, de nuestro país), por USD M 3.000 que efectuará la República Socialista de Vietnam.

Sin embargo, ante esta realidad evidente, la pregunta obvia es: "Y por casa, ¿cómo andamos?" (5) .

Aquí, lamentablemente, en otra dirección, ya que seà

Viaja para comprar

Naturalmente, no se trata de una mera cuestión de debate intelectual, por el contrario, aquellos países que se adscriban al viejo modelo y que, tal como lo hace el nuestro, recurran a una apertura unilateral e ingenua de su economía, cualquiera sea el motivo por el que lo hagan, deberán asumir ingentes costos en términos de producción, empleo y bienestar para su población.

A su vez, como reza el dicho popular: "Sobre llovido, mojado" (6), y no solo, las empresas argentinas, deben lidiar con la desprotección que del mercado doméstico que practica la actual Gestión, sino que además deben afrontar una revaluación del peso (a partir de una inflación en moneda dura que alcanza récords mensuales y anuales a escala mundial), absolutamente artificial que dificulta al extremo, el poder mantener los mercados foráneos conseguidos.

El deterioro de los Ingresos Populares (Sueldos, Salarios, Jubilaciones y Pensiones) ha reducido (hasta el extremo de la Depresión) el Mercado Interno, y el desequilibrio evidente en el plano cambiario, el de los terceros países.

En este marco, si no se pueden vender los bienes y servicios producidos "adentro", pero tampoco "afuera", el destino de los negocios "está cantado".

La Desocupación, antesala de la Pobreza e Indigencia, cabalgará por estas tierras, a mayor velocidad de las que hoy están transitando.

Para evitarlo, se debe procurar una sensata Administración del Comercio Exterior que, con un Tipo de Cambio Competitivo, facilite que las empresas locales tengan hegemonía en el Mercado Doméstico y garantice su influencia sobre los externos, fundamentalmente los hispanoamericanos.

El Nuevo Orden Internacional induce a los gobiernos a adoptar este tipo de políticas económicas, que no solo fortalecen el entramado productivo local, sino proporcionan los recursos indispensables para administrar la "res pública", tendiendo al bien común.

Es hora de que, el conjunto de la Dirigencia (buscando la armonía entre el Capital y el Trabajo), se avoque a sentar las bases de un Modelo de Desarrollo Permanente y Sustentable (MoDePyS) con orientación a la producción, que restituya el orden económico en nuestro país.

Lic. Guillermo Moreno
Lic. Pablo Challú
Lic. Walter Romero
 

Agradecemos la colaboración de Roberto Nuesch

 

1- Aquel sistema “neoliberal” vigente en el mundo durante décadas, pretendió crear (y lo consiguió) un ámbito de decisiones económicas independiente de las políticas internas de los países. Ese espacio era el del comercio mundial de bienes y servicios y el de las finanzas internacionales, donde las políticas nacionales se veían seriamente limitadas por los condicionantes que así se generaban: quedaba muy poco espacio para desarrollar políticas autónomas.

2- El refrán "No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista", significa que ninguna desgracia o momento difícil dura para siempre, y que tarde o temprano las cosas van a mejorar.

3-  Revolución Energética Norteamericana: proceso surgido a partir del abaratamiento de la extracción del “Shale, Gas u Oil”, que disminuyó los precios de venta de los bienes manufacturados, a partir de la baja -por la incidencia de la energía- de sus “costos primos”, y que facilita la recuperación del “made in USA”.

4-  Integran la Cuenta Corriente (CC) las denominadas: Balanza Comercial (BC) diferencia entre el cobro y el pago de exportaciones e importaciones de bienes; Balanza de Servicios (BS) saldos entre ingresos y egresos monetarios generados por seguros, fletes, turismo, aplicaciones informáticas y otros; Balanza de Transferencias Unilaterales (BTU) remesas, donaciones o ayudas monetarias a no residentes y Balanza de Rentas (BR) que recoge todos los ingresos y egresos generados por los factores productivos nacionales en el exterior, o de sus titulares no residentes en nuestro país.

5- “Y por casa, ¿cómo andamos?” es una expresión que usualmente viene seguida de una crítica personal, luego de estar conversando sobre un determinado contexto.

6- “Sobre llovido, mojado”, es un dicho popular, utilizado para señalar que, ante una situación muy difícil, se añade un problema más.