La nueva crisis financiera mundial
La quiebra del SVB (Silicon Valley Bank) pone de manifiesto la debilidad de los sistemas bancarios mundiales, y la interconexión que existe entre todos ellos, provocando que un problema de ésta magnitud impacte de lleno no sólo en el sistema financiero de EEUU sino en todos los países del mundo; y en forma mediata sobre todas las empresas.
Mientras el Presidente de EEUU Joe Biden anuncia en cámara que los estadounidenses no deben preocuparse por sus depósitos, el mundo siente que estamos ante una nueva crisis de 2008 que puede provocar un colapso de todo el sistema financiero. El colapso podrá ser mayor o menor, según la velocidad y profundidad de reacción del sistema y de las autoridades monetarias. Tal vez puedan hoy asimilarse las palabras de Biden a aquella frase del Presidente Duhalde “el que depositó dólares, recibirá dólares”, puesto que aunque el Presidente anunció que se devolverían los depósitos, la Secretaria Janet Yellen ya anunció que los ahorristas titulares de más de U$S 250.000, sólo recibirían bonos de deuda del propio SVB.
La intervención de la FED subiendo tasas es lo que ha acelerado o provocado el problema del SVB, lo que demuestra que la injerencia de los Bancos Centrales y los Gobiernos en los sistemas financieros es generalmente más perjudicial que beneficiosa. Párrafo aparte merecen las fallas en los controles de los negocios que hacen los Bancos con el dinero de los ahorristas. Ya lo demostró la defectuosa aplicación de la Ley Sarbanes Oxley antes de 2008. Aparentemente, los activos del SVB no habrían sido la causa de su caída, sino principalmente, el pánico de insolvencia al correrse la voz de que el Banco no contaba con la liquidez suficiente para responder a sus depositantes.
A éstas alturas y a pesar del discurso de Biden, la crisis se ha llevado puestos a dos Bancos más en EEUU (Signature Bank y Silvergate), y ha producido la venta de la subsidiaria de SVB en Inglaterra a un valor simbólico de Una Libra Esterlina al HSBC BANK. Esta filial tenía un valor estimado en activos de 1400 Millones de Libras Esterlinas.
El temor ha corrido ya por todos los mercados mundiales, provocando serias caídas bursátiles alrededor del planeta en el primer día hábil posterior al cierre del SVB.
A Argentina la afectará por varias razones. El retiro masivo de depósitos de los Bancos provocará una caída de todos los valores bursátiles, y más aún, los de los títulos públicos argentinos y de empresas argentinas, por lo que se conoce como el “fly to quality”, es decir, son momentos en que los ahorristas y los fondos de inversión preferirán ir a lo seguro, dejando bonos riesgosos como los argentinos, y papeles de empresas de países emergentes o países con problemas económicos graves como el nuestro; y huyendo de bancos y compañías que estén expuestas a éstas inversiones de alto riesgo. Y además, el retiro del dinero provocará una falta de liquidez que, sumada al aumento de las tasas dispuestas por la FED, encarecerá muchísimo más el crédito para Argentina y los particulares que residen en nuestro país. La inflación mundial, producto de la emisión mundial descontrolada con la excusa de la pandemia, provocará un reacomodamiento de todas las monedas y valores de los bienes, metales, commodities, etc, comprometerá la situación de muchas entidades bancarias, retraerá los créditos, acelerará devaluaciones y provocará muy probablemente una recesión a gran escala, e incluso una estanflación internacional.
Por su parte, el sistema financiero argentino puede estar en una situación de gran debilidad, ya que su altísima exposición a los títulos públicos argentinos puede acarrear serios problemas de solvencia. El BCRA hoy no resulta confiable como autoridad de contralor en éste aspecto, ya que es el propio Gobierno –del que la autoridad monetaria no es independiente- el que alienta ésta exposición, sumada a otra serie de medidas que no dan tranquilidad sobre la solvencia de las entidades. La suba del riesgo país castigará más aún la cotización de los bonos argentinos y, consecuentemente, afectará el valor de todas las carteras que hayan tomado posición en ellos. Es momento de tomar los recaudos necesarios para evitar lamentar luego pérdidas irreparables.
* Abogado Especialista en Asesoramiento de Empresas & Bancos
Ex Profesor de Derecho Financiero