Denunciado, se atrincheró el presidente de la CGE
Toda la Comisión Directiva lo acusa por inacción gremial y fraude financiero
Una crisis institucional inédita se desató en la Confederación General Económica (CGE), que incluyó denuncias penales contra vicepresidentes de la entidad, acusaciones de fraude contra el presidente Oscar Gentili y hasta el cambio de cerraduras de la sede porteña de la entidad. Casi como una anécdota quedó el pedido de intervención que realizó el ahora destituido jefe empresario contra su propia conducción.
Ayer la Comisión Directiva de la CGE decidió por unanimidad "suspender a Oscar Gentili como presidente de la entidad, por actos y omisiones contrarios a la entidad que paralizaron por completo su actividad institucional y gremial y por haber contraído deudas sospechadas de fraude". En su reemplazo, asumió Néstor Horacio Lombardi como presidente interino, con el mandato de llamar a elecciones en un plazo máximo de 180 días.
A Gentili lo acusan de haber realizado "actos y omisiones contrarios a la entidad que paralizaron por completo su actividad institucional y gremial, incumpliendo reiteradamente sus obligaciones estatutarias, al tiempo que puso a la entidad en indefensión jurídica colocándola al borde de la quiebra y promovió la intervención de la CGE". Así lo señala un comunicado de prensa.
En hechos correlativos, según pudo saber BAE Negocios, el destituido presidente convocó a una asamblea luego de la presión ejercida por el resto de la Comisión Directiva. Allí llegó enfrentado con todos sus integrantes, incluso con su secretario y el tesorero. Sólo le quedaban aliados dos revisores de cuentas, que están cuestionados por haber participado de una reunión de la que fue excluido el tercer integrante por una comunicación "errónea".
Gentili arribó a ese encuentro de fin del año pasado acompañado por un abogado y una escribana pública. Como la Comisión le negó la participación de ambos profesionales, el entonces presidente denunció a sus pares.
Ante ese escenario, y con el quórum de la asamblea, La Comisión Directiva completa dejó cesante a Gentili y designo a Néstor Lombardi como su sucesor para que convoque a una "Asamblea de Elección de Autoridades anticipada dentro de los ciento ochenta (180) días".
Si a esa obra le faltara condimentos pintorescos, Gentili decidió "atrincherarse" en la sede del cuarto piso de Rivadavia 1115. "Cambió todas las cerraduras de las puertas y además de ocupar un lugar contra la ley, le generó a los empleados del lugar una situación de inestabilidad laboral", señaló uno de los vicepresidentes de la entidad, que agregó que hubo presentaciones ante la Fiscalía porteña por contravención, y ante la Inspección General de Justicia por la irregular situación institucional.