Los grandes fondos de inversión de Wall Street esperan una pronta baja de tasas de la Reserva Federal de Estados Unidos, que estimule la economía de la principal potencia mundial y le devuelva el apetito por el riesgo a los inversores. La fuerte escalada en la guerra comercial llevó a que los operadores asignen una probabilidad del 66% a un recorte de tasas en la reunión de la autoridad monetaria estadounidense de julio. Para septiembre, las expectativas se estiran al 93,7%.

Las propias autoridades de la Fed alimentaron estas versiones al mostrarse abiertos a esa posibilidad en línea con los indicios de desaceleración del crecimiento mundial producto de las tensiones comerciales.

Esto fue lo que impulsó el cambio de tendencia en los principales mercados de referencia. Tras un mayo para el olvido, los principales indicadores bursátiles de la bolsa neoyorkina recuperaron entre 4 y 5% durante la primera semana de junio.

Para los grandes fondos, hay 66% de chances de un recorte en julio y 93,7% en septiembre

"Wall Street festejó la decepcionante creación de puestos de trabajo (en EE.UU.) debido a que elevó las probabilidades de que la Fed arranque con el recorte de tasas, aun cuando se origina en una desaceleración económica", remarcó el analista Gustavo Ber.

Los grandes fondos de inversión que se habían refugiado en los activos considerados como menos riesgosos volvieron a fluir hacia los mercados emergentes. Los castigados bonos y acciones argentinos tuvieron un rebote: los primeros acumularon un alza semanal promedio del 3% y el S&P Merval avanzó 5%. El riesgo país terminó en un elevado nivel de 948 puntos.

Para los operadores, será clave que este clima externo se sostenga para no complicar aún más la frágil situación de las finanzas nacionales afectadas por las debilidades económicas y políticas locales.