Empresarios industriales dejaron ver una "fuerte preocupación" por los "constantes cambios de regla" que le "quitan competitividad a la producción argentina", y alertaron por una pérdida de mercados de las exportaciones, con epicentro en el Mercosur, ante el avance del proyecto de Etiquetado frontal en los alimentos que el Congreso busca sancionar.

En la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA) se instaló un clima de "fuerte enojo" con los funcionarios del Gobierno por la falta de respuesta a las alertas que surgieron en ese ámbito empresario por las consecuencias en los negocios de la cadena industrial ante la falta de condiciones de homologación con países claves en las exportaciones.

"Quienes debían preservar el vínculo con el Mercosur y consensuar con la mirada de la industria, no lo hicieron. Si bien es sabido que ese es el ámbito adecuado para la armonización normativa, en estos meses se han resuelto de manera unilateral cuestiones estratégicas para la integración productiva y la proyección de nuestros mercados", se quejó Daniel Funes de Rioja, presidente de la cámara alimenticia Copal y de la UIA.

El abogado representantes de los industriales apuntó contra un "prejuicio ideológico" ante la "dificultad de mantener un debate con coherencia". Los empresarios calificaron de "apresurada" a la iniciativa impulsada por el oficialismo, y aclararon que "la industria siempre apoyó la implementación de un sistema de Etiquetado Frontal en los alimentos y bebidas que se comercializan en el país" aunque se criticó que se utilice el modelo chileno.

Los empresarios creen que se desestimó "la visión del sector durante todo el proceso de debate", y dejaron entrever una ventana judicial al sostener que "también se han ignorado los avances en las discusiones paralelas dadas en la  Comisión Nacional de Alimentos (CONAL), constituyendo ello el avasallamiento de facultades que la Constitución le ha reservado a las provincias".

"Dicho espacio contempla el consenso a nivel provincial y presenta coincidencias en el ámbito Mercosur, punto fundamental para la industria a los efectos del intercambio comercial y de las negociaciones internacionales en curso", sostuvo la Copal.

El temor es que las exportaciones al Mercosur, principal destino mundial de los alimentos envasados, se cargue con "un enorme sobre costo para la industria argentina, que la hará perder competitividad -innecesariamente- frente a la industria de terceros países con las que compite".

Fuentes consultadas por este diario admitieron que aun tienen expectativas de un cambio, al que consideran "fundamental". Piden modificar el Artículo 22 del proyecto, para que autorice al Poder Ejecutivo a "adecuar lo establecido en la presente ley con el fin de acordar con los Estados Parte del Mercosur la armonización de las normas y características del etiquetado frontal de envases de alimentos que deban adoptarse en cumplimiento de los tratados vigentes y promover la consecuente reformulación del texto del Código Alimentario Argentino".