La Cámara de Comercio planteó medidas que recuperar el consumo

La reunión fue en Desarrollo Productivo

BAE Negocios

Integrantes de la conducción de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), encabezados por el presidente Jorge Di Fiori, le llevaron al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, trece propuestas para reactivar el consumo interno y revertir la crisis de los mercantiles. Entre los puntos estaba la limitación a los intereses que los bancos cobran por la financiación en tarjeta de créditos, cuestión que el Banco Central reguló en las horas de la tarde de ayer.

"La CAC propuso diversas medidas para favorecer el desarrollo de la actividad", destacó un comunicado de prensa de la entidad empresaria, en donde detalló que en términos de tarjetas de crédito y débito pidió una "reducción de plazos de acreditación para los comercios, cobro de aranceles sobre el precio de venta sin IVA ni intereses, límites a la aplicación de tasas de interés, incorporación de negocios de proximidad a la tarjeta alimentaria".

También señaló a la regulación de las acciones de clase, para desalentar la "industria del juicio"; la "corrección de prácticas abusivas en materia de aranceles por derechos intelectuales"; el "impulso a la supresión de tributos por publicidad de productos que el propio establecimiento comercializa" y la eliminación de gravámenes a la "publicidad interior".

Los comerciantes reclamaron apoyo a las economías regionales a través de la aplicación de un "régimen del impuesto a las Ganancias diferenciado por el grado de desarrollo regional", de la "actualización de mínimo no imponible de las contribuciones a la seguridad social", la "promoción de baja de la presión tributaria subnacional (incluyendo tasas municipales)", y del "desaliento a la aplicación de excesivos regímenes de retención o percepción".

Entre otros puntos, pidió el "establecimiento de una cuenta tributaria unificada, que permita la compensación conjunta entre saldos impositivos y de la seguridad social"; la "generación de legislación para evitar el rechazo de la factura de crédito"; y las "exenciones impositivas para nuevas empresas, por un cierto plazo".

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