La industria alimenticia salió a hoy a defenderse de las críticas por los constantes aumentos en góndolas, al señalar que "no son causantes de la inflación".

"Contrariamente a lo que se viene afirmando, la evidencia indica que mientras que el IPC de alimentos y bebidas estimado a diciembre alcanzó el 40,4%, al universo de productos representados en Copal -que son regulados por la política de congelamiento- se les ha otorgado tan sólo un incremento de entre un 4% y 10,8%", afirmó la entidad presidida por Daniel Funes de Rioja.

De manera simultánea, "se han verificado persistentes incrementos de costos (en algunos casos superiores al 100%) que han dejado a nuestras industrias en una crisis sin precedentes, donde se ha puesto en jaque la sustentabilidad de muchas empresas y empleos", agregó la Copal.

"Desde Copal reiteramos nuestro compromiso con las familias argentinas y con la promoción y desarrollo de las empresas productoras que emplean formalmente a 400.000 personas", señalan.