Con el blue presionando, cayeron los depósitos en pesos
La dinámica cambiaria, en un contexto de tasa de interés baja en términos reales, generó un stop de dos meses en la racha de crecimiento del stock de ahorro en pesos
Los depósitos privados en pesos cayeron 2,1% real durante octubre. Así, se registró la segunda baja consecutiva, luego de ocho meses de puras mejoras, a lo largo del 2020. La dinámica cambiaria fue una clave, en un contexto en el que la tasa real cambió de signo y pasó a ser negativa. La resistencia del BCRA frente a la posibilidad de subirla contrastó con una brecha cambiaria que trepó hasta el 132% en su momento pico y contagió sus expectativas de devaluación.
La tasa de interés de los plazos fijos terminó el mes en torno al 2,8% mensual, en un mes en el que la inflación tiene piso de 3%. Quedarse en depósitos a plazo implicó una pérdida real de los ahorros. Además, la devaluación del oficial fue de 3,2%. Estas diferencias que hicieron negativa a la tasa se observaron en lo ocurrido con los plazos fijos. Según LCG, su stock cayó en términos reales.
La señaló: "Los depósitos a plazo mostraron una reversión del crecimiento real de los últimos 5 meses y cayeron 1,4% mensual real, evidenciando la pérdida de atractivo por estas colocaciones ante un contexto de incremento de la brecha con el dólar paralelo (pasó de promediar 83% en septiembre a 120% en octubre) y de las expectativas de devaluación. Tanto las colocaciones mayoristas como las minoristas revirtieron el buen desempeño de los últimos meses y perdieron contra la inflación (-0,8% y -2,6% mensual real, respectivamente)".
Desde ACM destacaron que los plazos fijos no ajustables por CER cayeron 4,2% real, mientras que los sí ajustables por CER subieron 5% en su stock, lo que da cuenta de una sustición, lo que revierte además la situación previa.
Además desde LCG afirmaron: "Los depósitos a la vista cayeron 0,5% mensual real, anotando la tercera baja consecutiva, aunque desacelerando respecto a septiembre (3,1 puntos porcentuales). La caída fue traccionada en su totalidad por la disminución de los depósitos en caja de ahorro (2,3% mensual real), mientras que en cuenta corriente crecieron 1,4% mensual real, luego de 3 meses de recortes reales".
En esa misma línea, desde ACM destacaron la relevancia que tuvo la baja de la tasa de Leliq e incluso el riesgo que implica semejante movida de cara al cierre del año, un período en el que el déficit fiscal crece en forma estacional, y por ende también aumenta la emisión monetaria. Pero, además, se trata de un momento del año en el que la oferta de dólares se desploma.
En ese sentido, dijeron: "Si bien los últimos meses del año (principalmente diciembre) presentan un aumento estacional en la demanda de dinero, cabe recordar que también existe un aumento estacional del déficit fiscal (el que en este contexto será financiado principalmente con emisión monetaria) y una menor oferta de divisas, lo cual podría tornar peligroso dicha baja de tasas más aún cuando el M2/PBI se encuentra ya circunstancialmente alto (producto de la pandemia) y que la velocidad de circulación del dinero parecería estar normalizándose lentamente".
Y agregaron: "Se debe tener en cuenta que la baja en la tasa de Leliqs afecta mayoritariamente a los depósitos de los ahorristas, por lo que si bien la suba de pases puede ir en el sentido correcto en el mercado cambiario, la baja de tasas de Leliqs no se explica si uno quiere incentivar al ahorrista a que direccione sus recursos a activos en moneda local. En este sentido, las tasa de plazos fijos de corto plazo se han visto reducidas, lo cual podría implicar mayores presiones al mercado paralelo del dólar".