Javier Milei llega al gobierno con la actividad industrial en caída
La industria cayó un 0,3% en octubre y se esperan "meses de mayor contracción" para lo que queda del año. Las restricciones al acceso a dólares para importaciones perjudicó a la producción
La industria llegó en baja a la asunción del nuevo gobierno, con una contracción del 0,3% en octubre y una caída de 1,4% contra los niveles de principios del 2023, según los datos oficiales. La escasez de dólares y la problemática para acceder a insumos del exterior, de la mano con la sequía, impactaron negativamente. En el promedio del año, se calcula que la industria caerá cerca del 1% y, hacia adelante, el presidente electo, Javier Milei, ya anticipó un panorama económico con freno en la actividad.
De cara a los dos meses que restan del 2023, la consultora LCG proyectó "meses de mayor contracción de la industria", y estimó que el año cerrará con una "caída en torno al 0,8% promedio anual para 2023, consistente con una baja de 1,9% medida punta a punta".
Por su parte, el presidente electo, Javier Milei, advirtió que durante los primeros 18 a 24 meses de su mandato la economía se mantendrá en estanflación, es decir, en un proceso de inflación sin crecimiento. De todos modos, un clima favorable para el agro puede hacer que el freno en la economía no sea tan pronunciado.
La UIA reveló en su IV Encuesta sobre Indicadores industriales y expectativas destacó que, dentro de las 550 empresas consultadas, "el 55% espera que la situación económica del país empeore el año próximo" y que "la caída de la producción estuvo asociada a las dificultades en el abastecimiento de insumos externos".
"Hasta ahora la escasez de dólares estuvo condicionando la operatoria de la industria a partir de la disponibilidad de insumos. Aunque descartamos que los controles sobre importaciones se sostengan, quedará ver cuál será la política cambiaria de la nueva gestión y las implicancias del sinceramiento del dólar sobre las exportaciones de la industria, pero también sobre la demanda de importaciones asociadas", explicó LCG.
El Índice de Producción Industrial (IPI) manufacturero del Indec reveló que, en octubre, el sector cayó un 0,3% mensual y un 0,8% interanual, después de dos meses de crecimiento marginal, donde el consumo de cobertura en la previa a las elecciones generales logró sostener a la actividad a pesar de la devaluación fiscal y la suba del tipo de cambio post PASO.
Por su nivel de incidencia en el IPI, la caída más importante volvió a estar en la producción de alimentos y bebidas, que registró una baja del 2,2% interanual, empujada especialmente por la molienda de oleaginosas, que exhibió una caída del 28,6% contra octubre 2022. "Producto de la sequía que afectó al sector, la cantidad de granos de soja que ingresó a molienda en el mes de octubre fue un 36,3% menor en comparación al mismo mes del año anterior", destacó la consultora ACM.
Si bien la sequía afectó tanto a la industria como a la acumulación de reservas, la estrategia del gobierno saliente fue fomentar la producción fabril y permitió un mayor acceso a las importaciones durante los primeros meses del 2023. Sin embargo, con las reservas netas rozando un negativo de USD 12.000 millones, esa tendencia se revirtió y obligó a administrar importaciones, lo que complicó la aprobación de las SIRA e incrementó la deuda comercial con los proveedores extranjeros.