La inflación en agosto 2022 se encamina a una desaceleración en comparación al pico de julio, aunque estará traccionada por los incrementos de las tarifas de gas, luz, prepagas y transporte. Expertos estimaron que rondará el 6% y preocupa que la inflación anual termine cerca del 100%.

"La inflación de agosto se ubicará arriba del 6%. Y parece que ese será el nuevo piso. Ya que llegue al 5% sería un buen dato", sostuvo el economista Fausto Spotorno y consideró que el Gobierno debe aplicar un programa monetario y fiscal que permita bajarla.

Con ese nivel de inflación mensual, el economista estimó que 2022 cerrará "raspando el 100%, a la vez que añadió: "Eso es un problemón, porque frenar un nivel de suba de precios de esa envergadura lleva mucho tiempo".

Frente a ese panorama, consideró que la situación política que vive la coalición oficialista, a partir de la causa judicial que involucra a la vicepresidenta Cristina Kirchner, perjudica a la economía.

 

"Creo que hay que dejarse de hinchar y dedicarse a la economía. No se puede dejar nada librado al azar y es necesario aplicar un programa monetario y fiscal que apunte a bajar la inflación", enfatizó el economista, en declaraciones al programa "Esta mañana" de radio Rivadavia.

Por su parte, el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO) destacó que en agosto y septiembre la Índice de Precios al Consumidor se verá afectado por varias subas autorizadas por el Gobierno como los aumentos en transporte, expensas, prepagas y naftas. Además, el próximo mes entrará en vigencia la segmentación de tarifas.

Dólar hoy: escasez de reservas 

Con respecto a la escasez de divisas, Spotorno explicó: "Cuando faltan dólares hay que reducir las importaciones. Lo único que contiene hoy el cepo es evitar que suban los precios de los bienes que se exportan. Pero entonces, al no pagar a los exportadores, se frena a ese sector. Y hacia adelante el problema de divisas se agrava".

A su criterio, a corto plazo "hay que frenar las importaciones. Una posibilidad es devaluando y la otra es aplicar regulaciones o trabas".

En ese sentido, indicó que una devaluación "ordena muchos incentivos, genera precios para los exportadores y el mercado decide cuáles son las exportaciones prioritarias".
Pero aclaró que la devaluación del peso, en el fondo, refleja "un gran problema institucional" y dijo: "Es que desde hace muchos años, se ha decidido usar a la moneda como un regulador de la política argentina".

Por último, Spotorno señaló que la Argentina "no ha podido construir políticas de Estado ni siquiera en algo tan básico como es que el sector público tenga las cuentas equilibradas".