El Gobierno de Javier Milei implementó una medida que impacta directamente en los jubilados y pensionados que cobran a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).

Paralelamente, se confirmó el nuevo aumento que recibirán los jubilados en marzo 2025 que será del 2,2%. Además, se volverá a otorgar el bono o refuerzo y el monto será de $70.000, sin modificaciones, así lo confirmó el ministro de Economía, Luis Caputo.

Mediante el Decreto 1039/2024, se determinó la eliminación de los créditos que el organismo otorgaba a este sector, así como a trabajadores en actividad.

La justificación oficial se basa en la necesidad de proteger el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), asegurando su rentabilidad y evitando que siga financiando préstamos a tasas que, según el Ejecutivo, resultaban perjudiciales en un contexto de inflación elevada. En 2023, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró un incremento del 211,4%, lo que habría generado pérdidas en el valor del capital prestado a jubilados.

El decreto deroga los artículos que permitían a ANSES destinar fondos del FGS para otorgar créditos. En su lugar, el Gobierno sostiene que la financiación debe ser proporcionada por el sector privado, bajo condiciones más competitivas. A su vez, argumenta que la medida permitirá optimizar la administración de ANSES, reduciendo costos y enfocando sus recursos en la gestión previsional.

Esta decisión se enmarca dentro del plan de ajuste económico impulsado por la administración de Milei, que busca reducir el gasto público y reorganizar las funciones de los organismos estatales. Mientras tanto, miles de jubilados y beneficiarios de ANSES quedan sin la posibilidad de acceder a préstamos que, en muchos casos, les permitían afrontar gastos esenciales.