Sergio Massa envía una misión técnica para apurar un acuerdo con el Club de París
El remanente de USD2.000 millones es el pendiente que le queda al Gobierno para cerrar el capítulo de deuda en moneda extranjera, después de los bonistas y el FMI.
El Gobierno apura un acuerdo con el Club de París para cerrar el último capítulo pendiente en materia de deuda en moneda extranjera, uno de los pedidos más reiterados por el FMI en las últimas discusiones con Argentina. Este miércoles viajará una avanzada técnica del Ministerio de Economía a la capital francesa para terminar de renegociar los USD2.000 millones remanentes, en busca de nuevos plazos y una rebaja en la tasa de interés. El titular del Palacio de Hacienda, Sergio Massa, tiene previsto visitar esa ciudad en noviembre para sellar un nuevo programa de pago con el organismo.
Fuentes del equipo económico dijeron a BAE Negocios que este miércoles viajarán a la capital Francia el titular del Indec y encargado en las relaciones con los organismos internacionales, Marco Lavagna, y el jefe de Asesores del Ministerio de Economía, Leonardo Madcur, para comenzar las reuniones técnicas con los representantes del Club de París a partir del jueves.
A mediados de mes, durante su segunda gira por Washington, Massa se había reunido junto a su equipo con el secretario general del organismo, Emmanuel Moulin, y sus funcionarios. Desde Economía señalan que el saldo de esa reunión había sido positivo, por lo que el arribo a un acuerdo estaba muy cerca. De hecho, el ministro tenía previsto un viaje a París esta semana, que finalmente postergó para mediados de noviembre y no descartan que sea durante una escala a esa ciudad en el marco de la próxima gira del presidente Alberto Fernández a la cumbre del G20 en Bali, Indonesia.
Luego del acuerdo con los bonistas privados en 2020 y con el FMI a principios de año, la renegociación con el Club de París es el pendiente que le queda al Gobierno en materia de deuda en moneda extranjera. En detalle, hay un remanente de USD2.000 millones del acuerdo firmado en 2014 por el entonces ministro de Economía Axel Kicillof, ya que en mayo de 2019 se suspendieron los pagos durante la gestión de Mauricio Macri y a finales de 2021 el Gobierno de Alberto Fernández decidió comenzar un proceso de reestructuración.
Ahora, Massa busca extender los plazos pero también mejorar el costo financiero. Es que el acuerdo de 2014 preveía un período de gracia de dos años posteriores al 2019 para cancelar el compromiso, pero con un interés del 9% anual que es el doble de la que venía aplicando para el programa argentino. Vale recordar que antes de su renuncia al Palacio de Hacienda en julio último, Martín Guzmán había acordado un puente de tiempo con el organismo para negociar pero su salida terminó demorando las conversaciones.
No es casualidad que el Gobierno busque encaminar este proceso luego de la aprobación de la segunda revisión con el FMI, ya que ese visto bueno era un paso clave a la hora de avanzar en ese sentido. De hecho, en el último staff report, los técnicos del Fondo insistieron en varios pasajes sobre la necesidad de cerrar el capítulo de deuda con el Club de París.
"Se deben mantener los esfuerzos de buena fe para llegar a un acuerdo con acreedores del Club de París en un calendario de reembolso de las obligaciones heredadas que respete la comparabilidad del tratamiento y sea consistente con la sostenibilidad de la deuda, la capacidad de reembolso y los objetivos de acumulación de reservas", consignó el documento del FMI.